WEwl año 2005 se cerró sin que en Extremadura se registrara ningún caso de Encefalopatía Espongiforme Bovina (EBB), mal de las ´vacas locas´. La EBB ha constituido una de las mayores amenazas contra la salud alimentaria y ha infundido el lógico temor en los consumidores. No en vano, el origen de la EBB pone de manifiesto el grado de manipulación sobre los animales cuando son tratados como una industria más, puesto que la causa es la alimentación con piensos cárnicos de ganado hervíboro. Por esta razón, el control y erradicación de esta enfermedad ha sido también uno de los grandes esfuerzos de la Administración. Que en Extremadura, a diferencia de otras regiones españolas, no se haya registrado ningún nuevo caso de ´vaca loca´ el pasado año indica que se han hecho las cosas bien en el control de la cabaña bovina. Pero tan importante como ese dato lo es el que los dos últimos registrados, en julio y noviembre de 2004, lo fueron en dos animales cruzados y procedentes de otras regiones, lo cual también es un indicio de la calidad de la cabaña extremeña y una tranquilidad para el consumidor.