Escritor

He aquí un término relativamente moderno. Lo cierto es que el diccionario Espasa de 1930 no lo contempla. Curioso. La agresividad es muy moderna. Han tenido que pasar muchas guerras para quedar claro que una cosa es la agresión y otra la agresividad. La agresión es traumática y la agresividad, no. La agresividad es hoy un modo de expresar la agresión por métodos aparentemente normales y civilizados. Lo que pasa es que ni todos podemos agredir de hecho, ni somos capaces de generar agresividad, que es una facultad con resortes muy oscuros, y nacidos de donde nunca se sabe qué profundidades y sobre todo a qué obedece, ni siquiera es una forma de la ironía, porque la ironía, en el momento que es agresiva, deja de serlo. La ironía es, como decía Benavente, "una tristeza que no quiere llorar y admite y perdona"... Es decir, que la agresividad no perdona. No te mata, pero no te perdona.

Viene todo esto a cuento porque no ceso de leer cosas sobre Mariano Rajoy, donde la agresividad no parece una cualidad de este fenómeno. La de Aznar está ya muy tratada y además admitida y perdonada, porque si se consigue una mayoría absoluta así, es que es perdonada. Todo lo contrario de Rodríguez Zapatero, que es una pera en dulce, que hasta cuando toma decisiones drásticas, la agresividad se diluye antes de ser propuesta, y no digamos si observamos los ojos azules de su esposa aterrorizada en los mítines y que predisponen para el pacto y la bonanza a su esposo, todo lo contrario del rictus de la boca de la Botella, que no le caben los dientes.

Pronto tendremos ocasión de tener más cercano a Rajoy cuando repita como su alter ego, que el anterior "no está preparado para gobernar", que es de una agresividad impropia de un gobernante que utiliza esa forma de agredir cuando el contrario además es modélico en sus formas y en sus resoluciones. En esto Zapatero es excepcional.

La agresividad aquí y ahora es tan grave y tan deleznable y que la sociedad lo admita da idea de su envilecimiento. A la mujer de Zapatero le esperan días de terror.