WLwa presentación mundial del nuevo Airbus 380 ha tenido la solemnidad que merecía uno de los proyectos de cooperación más emblemáticos de la Unión Europea. El avión de mayor capacidad del mundo, dotado de los equipamientos más innovadores, nace en los hangares de un proyecto conjunto tecnológico e industrial europeo.

Empresas públicas de Francia, Alemania y España, con la participación minoritaria y privada británica, han creado una aeronave que antes de iniciar su explotación comercial ya tiene una cartera de pedidos de 150 unidades, procedentes de todo el mundo. El consorcio europeo ha sido capaz de competir y ganar frente a la norteamericana Boeing en materia de naves de gran volumen y larga autonomía de vuelo. Es un éxito que se suma al que obtuvo recientemente la agencia espacial europea (ESA) al colocar una sonda en el satélite Titán.

La creación de este avión demuestra que los objetivos de la UE no acabaron con la cesión de la soberanía monetaria de los países para crear el euro. En tecnología, hacía falta ver si era posible establecer un gran nivel de cooperación científica. El primer resultado es este Airbus 380. Y seguirán otros. Que se mantenga esta política.