Quién dijo que los seres humanos apenas cambian en la vida? Un involucionista, sin duda. Alguien que no haya seguido de cerca la carrera artística de Alejandro Sanz, que acaba de estrenar su nuevo disco No es lo mismo. Por supuesto que no lo es.

Alejandro Sánchez Pizarro (Madrid, 18-12-1968), Alex para sus íntimos, ha dado tal vuelco como compositor y cantante que nadie le reconocería como aquel Alejandro Magno que grabó a los 16 años su primera canción: Los chulos son p´a cuidarlos. Después, a los 20, se descolgó con su primer elepé, Viviendo deprisa, y a los 22, con Si tú me miras. Eran canciones autobiográficas con títulos cursis: Los dos cogidos de la mano, Tu letra podré acariciar, Cómo te echo de menos, Vente al más allá, etcétera.

Pero en 1995, con el elepé Alejandro Sanz 3, el hijo del Jesule (guitarrista flamenco amigo de Paco de Lucía) perdió la virginidad ideológica con la antibelicista Por bandera. La evolución siguió a buen ritmo y dejó de lado el intimismo de sus letras. En una de ellas había glosado la renqueante pierna de su padre con este desahogo lírico: "La más bella de las danzas es tu cojera al caminar".

El Sanz estelar de Corazón partío y El alma al aire, ganador de siete grammys y plusmarquista de discos vendidos, se ha hecho más contestatario. "En No es lo mismo explico que hay que aprender a decir no". Como Raimon hace 40 años.