Está claro que Repsol, segundo accionista de Gas Natural (el primero es La Caixa), no apoya la OPA de GN para hacerse con Iberdrola. No es extraño. Alfonso Cortina de Alcocer (Madrid, 13-3-1944), presidente de la petrolera desde junio de 1996, lleva tiempo queriendo hacer lo mismo, aunque con Repsol-YPF en solitario, no junto a Gas Natural. Pero el Gobierno, que tiene la última palabra en las compañías privatizadas, no da facilidades, como ya demostró frustrando en su día la absorción de Iberdrola por parte de Endesa.

Hijo de Cortina Mauri (el último ministro de Asuntos Exteriores de Franco), Alfonso empezó a hacer carrera gracias a su hermano Alberto y a su primo Alberto Alcocer (los famosos Albertos, que ayer fueron condenados a tres años de cárcel por una estafa de 4.000 millones de pesetas). Estos le incorporaron en 1984 al hólding de las hermanas Koplowitz --Construcciones y Contratas-- para que gestionase la cementera Portland Valderrivas. Después, Alfonso Cortina ha demostrado ser la joya ejecutiva de la familia.

Bajo su presidencia, Repsol se ha expandido corriendo riesgos. El mayor, la compra de Yacimientos Petrolíferos Argentinos (YPF) en 1999, que pagó a tocateja y se endeudó. La crisis argentina agravó el problema. No obstante, él pone buena cara: "Mi apuesta de futuro es Repsol; seguiré comprando acciones".