A medida que avanza el tiempo, más claro está el origen de la crisis financiera y económica globalizada que padecemos todos, incluidos los extremeños. Crisis en la economía financiera, que contagia a la economía real, que se traduce en crisis de Liquidez, de Confianza e Institucional (tanto de grandes bancos y compañías de seguros, como de las instituciones supervisoras y reguladoras del sistema financiero en USA y en otros países que no han hecho su trabajo). Los efectos los estamos viviendo intensamente en este final de año 2008: fortísima contracción de la liquidez, con un estrangulamiento financiero brutal para las empresas, que las pone en muy difícil situación. Reducción del consumo, tasas de paro y de morosidad bancaria en crecimiento, (más difícil es medir la morosidad entre empresas, que también se está elevando) y una falta de confianza general en el sistema financiero.

Sin embargo, diciembre se presenta con un tipo de interés interbancario del 3´47, el más bajo en los últimos 5 años, y con tendencia a la baja, con una inflación extraordinariamente baja, con un consumo que no ha caído como se esperaba, así como un precio muy bajo de los derivados del petróleo y con un conjunto de medidas adoptadas, tanto en USA, como en la Unión Europea (las medidas suponen el 1,5 % del PIB de los 27 países de la UE), en el gobierno central (las medidas propuestas supondrán que el déficit del Estado superará el 3% previsto en Maastricht) y en la Junta de Extremadura (plan de infraestructuras, suspensión impuesto de solares, bonificación del impuesto bancario, fuerte dotación a Extraval) sin precedentes, como la misma crisis, que necesitan, sin embargo, algún tiempo para dar sus frutos. En suma, son un conjunto de noticias positivas, que van a favorecer la recuperación de la confianza de las personas en la situación económica.

Es importante que se valoren estos datos positivos y que la sociedad extremeña recupere la confianza, que es básico para que salgamos de esta delicada situación. En este punto, habría que decir que el sistema financiero extremeño, formado por 15 cajas de ahorro y 21 bancos, es eficiente y solvente, pues sigue un modelo de banca tradicional. Las posibles tentaciones de atesoramiento del dinero (guardarlo en casa) no son buenas, ni favorecen la actividad económica general.

Respecto a las perspectivas para el 2009, Wiston Churchill decía que "las previsiones son muy difíciles, sobre todo cuando se refieren al futuro". Lo más probable es que entremos en recesión económica a corto plazo, junto con la economía española. Las previsiones más pesimistas (Fondo Monetario Internacional) señalan una reducción del PIB en un 1% para el 2009. La duración e intensidad de este período dependerá de la reacción de los agentes económicos a las medidas de choque que se han tomado. Básicamente, el problema de liquidez deberá desaparecer y recuperar un nivel que permita a las empresas y familias funcionar normalmente. Probablemente se seguirá destruyendo empleo, sobre todo en la construcción y servicios y veremos una reducción de la actividad económica. Extremadura es muy dependiente del sector de la construcción, y las expectativas en el mismo no son muy claras.

Sin embargo, creo que la crisis constituye una oportunidad de hacer otra Extremadura, para cambiar el modelo económico e ir hacia una cultura emprendedora, una sociedad basada en el conocimiento. Es necesario trabajar en la creación de nuevo tejido empresarial y favorecer el crecimiento de las empresas establecidas. Algunas ideas en este sentido serían las siguientes:

a) Cambiar el marco fiscal actual que, comparativamente, penaliza a las empresas extremeñas, frente a las que tienen el domicilio fiscal en otras comunidades, como Madrid.

b) Las administraciones tienen que liberar los frenos existentes a la actividad económica.

c) Entre todos, debemos promover un modelo económico con un mayor peso de la industria, que contribuya a equilibrar la estructura económica de la región y a generar mayor valor añadido que se quede en la región. Potenciación de la innovación y el conocimiento para ser más competitivos.

d) Todo ello en el marco de una estrategia por la competitividad, sin olvidar en ningún momento que el principal enemigo de la estrategia es la coyuntura. Y la actual no puede ser más adversa.

Es verdad que asumir riesgos puede que no esté de moda, pero es la única manera de progresar. Emprender retos difíciles siempre es una oportunidad de ponerse a prueba. Los momentos duros dan la medida de nuestras posibilidades y muestran nuestras debilidades. Los extremeños debemos demostrarnos que se puede llegar más lejos de lo que nadie lo hizo antes.

Como decían los profesores de la Universidad de Harvard, Porter y Harrigan. "Las fuentes de riqueza más importantes se crean, no se heredan". Sólo los sueños transforman.