Gabilondo (SER) aventuró ayer que daría que hablar el artículo de Luis María Anson en La Razón y resumió lo más relevante. El título era contundente: "Las ratas empiezan a abandonar el barco". ¿Lo más relevante? Las cuitas de Aznar "han llegado al fino olfato de las ratas que cobardean ya para abandonar el barco del PP... Unas docenas de periodistas independientes se salvan de la quema. Los demás ofician la ceremonia de la confusión, entre inciensos y jabones olorosos a las finas hierbas. Profesionales amorrongados, pávidos, pendejos, amilanados, cínicos hasta decir basta, preparan el trasvase de barcos y albañales. Hay --concluía amenazante-- un alto cargo popular que ha redactado un informe sobre las dádivas otorgadas a las ratas: publicidad institucional, patrocinios, concesiones, licencias, frecuencias de radio, televisiones digitales, adquisiciones de ejemplares en bloque, informaciones privilegiadas, exclusivas clamorosas, la biblia en cueros, en fin, que dejará in púribus a muchos cuando se haga pública la verdad de tantas mentiras".
Luis Herrero (COPE) lo abordó al final de una delirante tertulia sobre los sucesores de Aznar, para despotricar de Anson. Federico Jiménez Losantos se guaseó de que el editor de La Razón firme como miembro de la Real Academia Española --"le degrada"-- e ironizó que muchas le parecían unas docenas de periodistas: "No hay tantos justos en una docena". Se preguntaron quiénes serían. Pero lo dejaron correr, y Antonio Casado concluyó: "No es negativo que Anson repita la metáfora de las ratas, porque son los mismos".
