WEwl pasado día 5 el consejero Guillermo Fernández Vara señalaba que el SES controlará las tarjetas sanitarias de los inmigrantes para evitar fraudes, ante la sospecha de que algunos extranjeros con tarjeta no viven en la región. El sindicato Confederación Española de Policía avanzaba ayer en este periódico datos y cifras sobre ese fraude: más de mil personas sin papeles están empadronadas en los ayuntamientos extremeños a pesar de que ni siquiera viven en España. La razón de este proceder ilegal es obtener el permiso de residencia y trabajo demostrando el arraigo , una figura que sólo existe en la legislación española y que según el sindicato es burlado porque hace de llamada para los inmigrantes. Comoquiera que la inmigración es un fenómeno que hay que manejar con cuidado para evitar efectos indeseables, y como es bien constatable la facilidad con la que cualquier persona se empadrona en España, sin apenas requisitos, hasta el punto de que un redactor de EL PERIODICO, para constatarlo, se empadronó en Barcelona por internet, las autoridades deberían estar vigilantes en la persecución de estas conductas porque, de su abuso son víctimas, sobre todo, los inmigrantes que verdaderamente necesitan regularizar su situación y trabajar con todas las de la ley