Alemania espera impaciente que mañana se estrene El hundimiento, la película que narra los últimos 12 días de la vida de Hitler. El actor suizo nacionalizado alemán Bruno Ganz (Zúrich, 22-3-1941) encarna al führer en una magistral interpretación no exenta de polémica por la humanización que destila el cruel personaje. El propio Ganz ha dicho: "No me avergüenzo de haber sentido compasión por Hitler durante unos cuantos segundos". Como ha advertido el director del Museo del Cine berlinés, por primera vez en una película alemana se le da un "toque humano al monstruo". El nombre de Ganz va unido al de notables directores con los que ha trabajado: Wim Wenders (El amigo americano y El cielo sobre Berlín ); Werner Herzog (Nosferatu ); Franklin Schaffner (Los niños de Brasil ): Volker Schlöndorf (Círculo de engaños ); Alain Tanner (La ciudad blanca ), etcétera. Pero no hay que olvidar que el origen de Ganz es el teatro, género en el que se profesionalizó a los 24 años haciendo Hamlet. En el 2000, marcó un hito en la Expo de Hannóver protagonizando el Faust de Goethe en su versión íntegra. Nada menos que 21 horas de duración. Tímido y de carácter difícil, Ganz confiesa que se metió a actor para romper con su soledad de joven pequeñoburgués.

Nunca pareció muy feliz, pero tampoco tan desgraciado como algunos de sus personajes.

ANGEL SANCHEZ