TLtlora el ordenador. Tiembla el pensamiento. Todavía cuesta trabajo asumir tu ausencia. Pero queda, como a ti te gustaba Carlos, el soporte escrito. El mismo sobre el que reflejabas tus poéticas ilusiones para EL PERIODICO EXTREMADURA. Tus documentadas denuncias sobre la ciudad que amabas. O bien la forma epistolar con la que te dirigías a los compañeros para entregarles tus opiniones. Aquellas que no querías que permanecieran tan sólo en una sencilla conversación.

Es tiempo de recuerdos. De imágenes. De sonidos. Rostros y llamadas. Lecturas de escritos. Reflexión. También ejemplo. Quizás eso es lo que más perdura. El análisis de lo que fuiste, de lo que supusiste para tus compañeros y amigos.

Añoraré tu ritmo pausado y te veré en los papeles, en el paseo, en Blanca, en nuestra amiga Charo, en la agenda, en los congresos, en el baloncesto, en las conferencias, en el colegio, en tu coche, en el teléfono donde te quedé pendiente de unos saludos y el vino de Valdemorales.

El teatro, por cierto una de tus postreras actuaciones como jurado en Malpartida de Cáceres, sigue. Espero que sea de tu gusto.

*Historiador y Secretario del PSOE en Cáceres