CORRUPCIÓN

Una forma de vida

José Gordón Márquez // Azuaga

No hay día que no aparezca un nuevo caso de apropiación indebida, corrupción... No vivimos en una sociedad corrupta, lo que pasa es que hay personas que el pecado de la corrupción lo han elevado a sistema. Para ellos se convierte en una manera de vivir. No les importa que haya gente en el umbral de la pobreza y no tengan cubiertas las necesidades más básicas. En una entrevista, el Papa Francisco decía: «La corrupción no es un acto sino una condición, un estado personal y social al que uno se acostumbra a vivir».

DESDE FRANCIA

Tras los comicios tocará regresar

María Ferre // Cáceres

El domingo, muchos españoles estuvieron atentos a los resultados de las elecciones presidenciales francesas, en especial, los expatriados, que por razones obvias trabajamos actualmente allí. El triunfo de la derecha no fue una sorpresa para la gran mayoría de nosotros, visto el escenario de creciente populismo y racismo que nos rodea. También ayudó la reforma laboral y la mala gestión económica y social de François Hollande. Tres días después del último atentado en París, la ultraderechista Marine Le Pen obtiene el segundo mayor porcentaje de los sufragios gracias a un programa nacionalista marcado por duras medidas antimigratorias que contradicen la tradición republicana francesa. La primera posición la encabeza Emmanuel Macron, con una oratoria que nos hace recordar a la de Albert Rivera. Entre los vencidos quedan François Fillon, que, a pesar de sus múltiples escándalos de corrupción, todavía tenía esperanzas de ganar, y Mélenchon, que ha ganado adeptos gracias al hundido Partido Socialista. Macron y Le Pen se disputarán la presidencia en una segunda vuelta.

La precariedad laboral en España me obligó a emigrar a París, donde llevo casi dos años trabajando como fisioterapeuta en la función pública. Emmanuel Macron pretende suprimir 120.000 puestos de trabajo de funcionarios y Le Pen promete un referéndum por el Frexit. Quizá sea ahora cuando deba empezar a plantearme el volver a España. Quizá en dos semanas me toque elegir.