Relaciones humanas
Miradas que queman
Eduardo Andrés // Badajoz
Todos tenemos una pequeña llama en nuestro interior, una combustión que solo se da cuando encontramos al comburente adecuado. Todos somos comburentes (compuesto químico que oxida a otra sustancia en reacciones electroquímicas o de reducción-oxidación), aunque a mí me gusta llamarlo principio de incandescencia, basado en que a veces somos capaces de encontrar a personas que no nos despiertan ningún interés y a otras que nos despiertan cierta curiosidad y la llama es capaz de vislumbrarse levemente. También están las que, con solo mirarte, son capaces de incendiarte por dentro y aquellas a las que a veces descuidamos por la confianza de que la llama no se apagará nunca. No existe la incandescencia infinita, pero acepto el reto de rebatirlo y de convertirnos en seres incandescentes e infinitos.
Sanidad pública
Faltan psicólogos
Manuel Ruiz // Barcelona
Nuestra sanidad pública parece dirigirse básicamente a la sanación del cuerpo y olvida la curación mental. Muestra de ello es que en los CAP no existe la especialidad de psicología clínica. Tan solo los hospitales, y únicamente los importantes, disponen de dicho servicio, donde se suelen ofrecer visitas una vez al mes. La ayuda que el psicólogo puede ofrecer a la persona mitiga sus problemas en la vida y el desorden mental. No prevenir a tiempo nos lleva a la realidad actual. En España se ha incrementado el consumo de somníferos y ansiolíticos y el suicidio sigue aumentando como causa no natural de muerte. La convocatoria para el PIR (psicólogo interno residente) del año 2017 ha sido de 127 plazas para 4.025 aspirantes.
Cristianismo
Entender a la Iglesia
Cristina Casals // Madrid
Estuve en una conferencia donde nos aconsejaron unos libros para entender la situación de la Iglesia. Son dos entrevistas transcritas, por un lado, al Papa emérito Benedicto XVI y por otro, al cardenal guineano Robert Sarah. En la primera, titulada Últimas conversaciones, por primera vez en la historia del cristianismo, el Papa habla sobre su renuncia, su pontificado y su vida. Muchas preguntas son personales pero sobre todo se abordan las cuestiones más acuciantes sobre el futuro de la Iglesia católica. En la segunda, titulada Dios o nada, sorprende la vida de Robert Sarah, su lucha contra la dictadura que le llevó a la persecución y condena a muerte.
