PATENTE DE CORSO

Más «autoritarismo»

con los deberes

Joaquín León // Cáceres

Sigue el vicepresidente del sindicato PIDE, Alfredo Aranda, por segunda, intentando darse publicidad a costa de los demás, en este caso el de mi persona y el de FREAPA-CP por el tema de los deberes escolares, con fórmulas de épocas pretéritas: busca un enemigo y repita falsedades hasta que se conviertan en verdad. Muy mal le tiene que ir.

Con respecto a los datos de la encuestas, un dato que ya por si sólo justifica el estudio y el dictamen: un 64,1% del profesorado no se coordinan entre ellos a la hora de mandar deberes. ¿Si en este periódico no se coordinasen los redactores por secciones, que amalgama de ejemplares tendríamos? Pues eso. Podríamos seguir diseccionando la encuesta, donde todos tenemos que mejorar.

Argumenta con la manida libertad de cátedra del profesorado como si fuese «patente de corso», obviando entre otros derechos el de los menores y los de las familias con los que entra en conflicto.

Para el colmo, dentro de su actitud autoritaria se permite la barbaridad de poner en tela de juicio la capacidad de ser padre y madre cuando dice: «dado que hay algunos progenitores, pocos espero, que piensan que los niños son de su propiedad». O cuando dice: «A muchos progenitores les cuesta interactuar con sus hijos y no por falta de tiempo, sino de sintonía con ellos. ¿Quién evalúa a las familias para que cumplan con su parte de responsabilidad?». Total desvarío intentando responsabilizar de manera tan desafortunada a las familias. Entenderá, como mínimo, que habrá que empezar evaluando al profesorado que tienen la obligación por su condición de funcionario.

Sin cumplir la condena

Pobre Blesa

F. Gomis Mas // Barcelona

¡Pobre Miguel Blesa! Ya sea por un accidente o por un momento de desesperación por todo lo que ha hecho o sufrido, el exbanquero ha muerto sin poder realizar lo que sin duda era su mayor deseo, aunque hubiera terminado siendo pobre: colaborar plenamente con la Justicia, devolviendo a los más afectados y al conjunto de los españoles los dineros que por error o por horror había quizás evaporado.

Toca ahora a la Justicia cumplir cuanto antes, para merecer su nombre, esa labor.