Cartas al director

La Federación de Asociaciones Locales del Carnaval Pacense quiere hacer extensivo nuestro más sincero agradecimiento a todos los grupos del carnaval por el esfuerzo que han realizado para desfilar el domingo a pesar del intenso aguacero que cayó.

Queremos que este agradecimiento se haga extensivo a todo el público en general que nos ha acompañado en nuestro recorrido, a los medios de comunicación, Policía Nacional, Policía Local, Cruz Roja y a la organización, a todos por el esfuerzo extraordinario que habéis hecho una vez más y a pesar de la lluvia, Badajoz es carnavalera por excelencia, el éxito de nuestro carnaval ha quedado demostrado a pesar de los acontecimientos que es la fiesta más importante de nuestra ciudad, gracias a todos de corazón en nombre de nuestro Carnaval.

Desde la FALCAP queremos dejar claro que en ningún momento desde la organización municipal se ha obligado a los grupos a desfilar, todo lo contrario se nos dio la posibilidad de que en consenso de todos los participantes se tomara la determinación de hacer lo que los grupos creyeran necesario.

Los grupos tomaron la decisión de salir:

1.º Sobre todo por respeto al público que nos acompañaban durante el recorrido.

2.º Por el respeto a las comparsas que se habían desplazado de la provincia.

3.º Porque la experiencia nos ha dado que desplazarlo hasta el domingo siguiente el desfile queda deslucido después de una semana sin ambiente carnavalero ni la participación de los grupos de la provincia.

Un riesgo que todos los años por estas fechas corremos y que por desgracia este año el tiempo no nos ha acompañado.

Antonio García Alvarez

"Violencias domésticas"; un artículo ambiguo>/p>Directora del IMEX

Como directora del Instituto de la Mujer de Extremadura (IMEX), tengo la responsabilidad de hacer algunas aclaraciones al artículo del 3 de febrero titulado "Violencias domésticas" porque entiendo que puede llevar a la opinión pública a interpretaciones erróneas sobre la política que se lleva acabo desde la Junta de Extremadura en cuanto a los programas de familias y al tratamiento de la violencia de género.

En primer lugar, en este escrito se duda, supongo que por desconocimiento, de la existencia de medidas de protección a las familias en las políticas del Gobierno de España y de la Junta de Extremadura, medidas que se han concertado y siguen siendo contenido de la concertación social: planes de atención a las familias en los que se contempla el tratamiento de la violencia que se produce dentro del ámbito familiar.

En segundo lugar, se cuestiona la legalidad de las acciones emprendidas por las administraciones a partir de los mandatos de la Ley Orgánica de Medidas de Protección contra la Violencia de Género, ley que se aprobó en 2004 y en la que, recogiendo la demanda de las organizaciones de mujeres, se reconoce que los poderes públicos no pueden ser ajenos a la violencia contra las mujeres, y se responsabilizan del desarrollo de las medidas que permitan luchar contra la violencia de género de forma específica y global.

Pero, en el artículo, jugando con la ambigüedad, el autor compone su argumentario con el menosprecio a la especial incidencia de las agresiones sobre las mujeres por parte de sus parejas y, tratando de enmascarar el flagrante ataque sobre los derechos de las mujeres que supone la violencia machista, acude a la equiparación de "todas las violencias", sin duda intentando lanzar un mensaje que todas las personas identifiquen como positivo pero que esconde una consideración del problema que, durante años, ha servido para justificar la ausencia de medidas de protección para las mujeres víctimas.

Fotos de archivoEn relación con la noticia de ayer 4 de febrero de 2008, sobre la huelga de funcionarios de la Administración de Justicia EL PERIODICO EXTREMADURA incluye dos fotografías, de una anterior protesta, --la fecha puede verse claramente en la propia foto--, tomada en el juzgado que en aquel momento se encontraba en funciones de guardia y de una reunión en la que podemos ver al ministro de Justicia en mangas de camisa (foto de archivo).Con ellas se consigue que el lector pueda tener dos impresiones a mi juicio erróneas e inducidas; primera, parece que el seguimiento de la huelga es mínimo, --en una oficina de tres puestos de trabajo hay dos funcionarios--, y segunda, parece que el ministro está trabajando denodadamente por resolver el conflicto.Ninguna de ellas son ciertas; el seguimiento de la huelga raya el 100% (a pesar de unos servicios mínimos abusivos que en algunos casos son del total de la plantilla) y el titular del ministerio no se ha sentado en ninguna mesa de negociación desde el inicio de las protestas hasta el día de la fecha.Valentín Calderón JiménezFuncionario de laAdministración de Justicia