¿Quo vadis, Plasencia?

Luis F. López López

Plasencia

La continua serie de despropósitos protagonizados en la presente legislatura por el equipo de gobierno municipal: Creación de zona azul en ronda de Higuerillas y marcha atrás ante la protesta ciudadana; las acciones emprendidas por el concejal Barbancho en materia de ruidos y horarios de cierre, rectificadas por la alcaldesa a su regreso de vacaciones; las polémicas por los cambios de dirección en diversas calles de la ciudad; la incapacidad para hacer cumplir el pliego de condiciones a la empresa adjudicataria de la limpieza en la ciudad; el vandalismo que campa a sus anchas; el incumplimiento de las ordenanzas de las terrazas al aire libre, etcétera, han tenido su colofón en el asunto que seguidamente expongo.

La petición realizada a la ciudadanía de Plasencia para que se movilice a favor de la ubicación de la estación del AVE en Fuentidueñas, demuestra una falta de peso político de nuestros representantes ante las distintas administraciones, una carencia de recursos y un desinterés ante la situación que hace pensar. Mientras nuestra alcaldesa se dedicaba a criticar al alcalde de Malpartida, que planteaba una alternativa que es la que maneja el Ministerio de Fomento (lo que indica que tiene mejor información que Elia, lo que ya es preocupante), se ha perdido tiempo en gestionar, que es de lo que se trata, reconociendo a estas alturas, que la ubicación que se desea, es difícil.

Pero es que además, se apela a la ciudadanía, lo cual resulta chocante, puesto que ese partido nunca ha sido partidario que el pueblo se convoque (recuérdese la Plataforma Ciudadana y la lucha encarnizada del ayuntamiento del momento, en desactivarla), y la ciudadanía, que no es otra tonta y no le gusta que se la manipule, ha respondido con su inasistencia --las fotografías de la reunión son desoladoras--.

Esta apelación al pueblo se está poniendo de moda en el PSOE. El señor Vara quiere convocar a toda Extremadura a una gran manifestación, cuya fecha se está barajando y ahora nuestro ayuntamiento pide nuestra ayuda para tratar de solucionar un problema que no han sabido gestionar.

Pues bien, en política se tiene un poder delegado por el pueblo para tratar de solucionar problemas, y cuando por falta de peso político, de capacidad de gestión o de interés en el momento adecuado, estos problemas no se resuelven, sólo hay un camino digno: Dimitir y dejar paso a otros. Lo demás es aferrarse al puesto.

> Carta abierta a Felipe Vela

Isabel Gil

Cáceres

Me dirijo a usted como comisario de Plataforma Cáceres 2016 con el ruego de que, tanto usted como los componentes de dicha plataforma reflexionen sobre algunas consideraciones que paso a relatarles, pues mucho me temo, señor Vela, que están pasando por alto muchos detalles que, en mi humilde opinión, son esenciales.

Amo a mi ciudad sobremanera pero reconozco que, hoy por hoy, su atractivo deja mucho que desear. Cuando alguien invita a sus amistades a visitar su casa y permanecer unos días en ella, el principal empeño es adecentarla, es decir, limpiarla, hacerla lo más acogedora posible sin hacer alardes de lujos y sin estridencias decorativas pero sí al menos, ofrecer un mínimo de embellecimiento que resalte a primera vista y que proporcione un regusto tanto al anfitrión como a los invitados.

Señor Vela, el pasado fin de semana acompañé a unos amigos de Salamanca que venían expresamente a conocer nuestro conjunto monumental; paso obligado para llegar hasta el incomparable recinto,es la plaza Mayor, como todos los cacereños sabemos. Sentí vergüenza ajena al oír los comentarios de mis amigos sobre el mal estado en que se encuentran los soportales de dicha plaza, sus bóvedas desconchadas, las piedras de los arcos que las sustentan, sucias, restos de basura (bolsas de plástico, vasos, etcétera) y esquinas de algunos establecimientos muy sucias a saber si de pis canino o humano... así como pintadas en las fachadas. Dicha desidia (por incivismo y falta de vigilancia o de interés por parte de quien corresponda) no creo que nos dé una calificación muy alta para el examen a la candidatura de Capitalidad de la cultura. Espero de usted y sus colaboradores que el dinero que administran a tal fin, sirva para subsanar tantos puntos negros como existen en nuestra ciudad, sobre todo, en la mencionada plaza Mayor. !Ah, y otro ruego! Por favor, no se les ocurra hacer otra mal llamada fuente como la de la calle de San Pedro de Alcántara, porque !eso sí que ha sido una tomadura de pelo!