¿Quiénes son aquílos animales?

Acebo es un pueblo pequeño donde comienza a vislumbrarse la democracia, pero donde todavía reina el despotismo y la autocracia. La última marranada es la que tienen que soportar los pocos ganaderos del pueblo, ya que mediante una carta firmada por el señor alcalde de Acebo, don Manuel Montero Córdoba, se les prohíbe cualquier aprovechamiento de pastos que se realice con ganado de cualquier clase en el cauce del río Cervigona, para evitar la contaminación de las aguas del río (todo ello seguido de unas leyes y un reglamento). En caso de no cumplir esto, avisan al Seprona.

Todo esto está muy bien, pero los ganaderos están alterados, ya que toda la vida el ganado ha pastado y ha bebido en las márgenes del río. Si el ayuntamiento quiere ayudar tanto a los bañistas como a los ganaderos, como mínimo debería suministrarle unos pilones con agua.

GUSTAVO EGIDO BLAS. Acebo

Buena noticiapara los trabajadores

A mediados de junio pasado El Periódico Extremadura editaba un suplemento especial dedicado a la octava convocatoria del premio ´Empresario extremeño del año´. Dicha publicación se hacía eco de los logros de nuestros empresarios y emprendedores, hablaba del crecimiento de Extremadura, de las nuevas autovías, los nuevos proyectos empresariales que crearán más puestos de trabajo y así un largo etcétera. Pero sin duda, al menos desde mi punto de vista, la mejor noticia aparecía enmarcada en un pequeño cuadro y llevaba por título ´La ETT, en picado´. En pocas palabras se decía que las empresas de trabajo temporal han seguido una peligrosa senda descendente en su actividad, ya que el número de contratos de ´puesta a disposición de trabajadores´ ha descendido a nivel de 1997. Esto sin duda, al menos para mí, es un notición, ya que soy de los que piensan que este tipo de empresas jamás deberían existir, puesto que por duro que suene hay que decir que las ETT no producen nada ni generan riqueza, producción o bienestar social, únicamente comercian y trafican con los trabajadores. Siempre he defendido que la solución al problema que plantean las ETT pasa porque el INEM y los distintos servicios autonómicos de empleo cumplan con su función como agencia pública de contratación. Debemos seguir luchando por erradicar este tipo de empresas-parásito y reivindicar mejoras en las condiciones de contratación de los trabajadores, lo que a su vez implica reformar a los propios servicios públicos de empleo.

PEDRO MIGUEL LOPEZ PEREZGuareña (Badajoz)

¿Quien callaotorga?

Leída la carta, publicada en la sección de ´Cartas al Director´ de este mismo diario (día 15 de julio del 2003) y firmada por la Consejería de Educación, Ciencia y Tecnología en defensa de la limpieza en los procedimientos del concurso oposición al cuerpo de maestros, (lo cual puede deberse, a que los procedimientos de años anteriores se encuentran en los tribunales), no admira su terminación: ´...y además no vaya a ser que quien calla otorga´. Me gustaría que meditasen los señores de la Consejería, sobre dicha frase y que piensen más las cosas antes de escribirlas. Soy asiduo lector de este diario y recuerdo que, en el verano del 2001, también hubo escritos denunciando las irregularidades cometidas en la especialidad de Pedagogía Terapéutica y, en el del 2002, denunciando las cometidas en las especialidades de Lengua Castellana y Literatura, Tecnología y Música (por citar alguna), en ambos casos, la consejería calló, pero ahora intenta presumir de transparencia, y dice: ´el que calla otorga´, ¿acaso, su silencio de entonces fue porque otorgó? Señores de la Consejería, en vez de proclamar sus virtudes, sean ustedes virtuosos. Reconozcan también sus errores (no lo hagan solamente en privado) y piensen en aquellas personas a las que se les negó su merecida plaza (ustedes saben quienes son) y que, debido a su desmotivación, por la usurpación, en estas oposiciones, no han conseguido ni aprobar el primer examen, tienen familia y pudiendo ser funcionarios por méritos propios, se pueden quedar en la calle. Señores de la Conserjería, más justicia y corrijan también sus errores, que ´corregir es de sabios´. Lo que verdaderamente asombra es su silencio en las oposiciones del año 2001 y 2002.

JESUS MARTIN LUENGO. Cáceres