Quemado mi pasado,presente y futuro

¡Qué desolación! Han quemado mi pasado, mi presente y mi futuro. Soy Alejandro Serrano el de los Pinos , natural de Valencia de Alcántara, vecino de La Codosera. Acabo de regresar de ver el manto negro que ha quedado tras arder una gran parte de mi vida, lo he visitado con mis hijos, nietos y biznietos, repitiendo el mismo paseo que yo hice con mi bisabuela que me enseñó a valorar la belleza de los pinares.

Me siento no solo defensor, sino creador de parte del bosque que poseíamos, en el que como bien saben los que me conocen, he empeñado toda mi vida y todo mi esfuerzo. En mi empeño por tal fin incluía tenerlo protegido con cortafuegos y caminos limpios para poder evitar este tipo de catástrofes y por lo que fuí denunciado por el agente valentino de Medio Ambiente.

Esta carta es un grito para expresar mi impotencia e indignación por lo que considero una total negligencia por parte de los responsables de la extinción de incendios, que sin tener un conocimiento adecuado y exhaustivo de la zona, en lugar de cumplir con su cometido de una forma contundente se limitaron a rechazar (con aires de autosuficiencia) la experiencia que durante tantos años hemos ido acumulando los vecinos, que en definitiva fuimos los que sofocamos el fuego.

¿No saben estos señores que cientos de años antes de existir ellos ya había incendios que extinguíamos las distintas generaciones que nacimos y nos criamos en el pinar? En mis 74 años no recuerdo que ninguno se extendiese más de cinco hectáreas. Por otra parte, quiero recordar y agradecer la labor callada y eficaz durante años de los anteriores retenes de Icona, dirigidos por los forestales Lucinio y Gerardo, que fueron desplazados por el nuevo servicio de Medio Ambiente, cuyos coordinadores no solo no apagaron el fuego, sino que encendieron la desconfianza. Con todo el dolor y las lágrimas que esto me produce, ruego que no caigamos en el olvido.

ALEJANDRO SERRANO. La Codosera

¿Embriones?,no gracias

Como es habitual por estas fechas vuelve la campaña contra el consumo de pezqueñines , que este año incluso ha fichado a los niños de Cuéntame . En la loable misión de salvar pececitos no se escatiman medios. Esta campaña ha coincidido con la aprobación del proyecto de reforma de la Ley de Reproducción Humana Asistida y el debate surgido sobre el futuro asignado a unos 200.000 embriones sobrantes de las técnicas de fecundación in vitro . Los embriones, pese a la aparente rotundidad de su nombre, son esos seres humanos muy pero que muy pequeñines que un día fuimos todos, pero a diferencia de los pezqueñines no verán la luz porque ya están pescados y hasta congelados, y su noble destino será el de la experimentación. Así que ya sabemos: a los pezqueñines , chupete, biberón y mimitos; y con los embriones a la sartén de los laboratorios para que puedan ser troceados en una sofisticada carnicería al amparo del sagrado nombre de la ciencia. ¿Quién iba a pensar que en nuestra avanzada civilización occidental millares de seres humanos incipientes llegarían a tener menor protección que las crías de boquerones?

MIGUEL ANGEL LOMA. Sevilla

¿Dónde está la ministrade Medio Ambiente?

En Extremadura empezamos a echar en falta, una vez más, que el Gobierno se acuerde de nosotros tras los devastadores incendios. Ni siquiera la ministra de Medio Ambiente se ha acercado para comprobar in situ los daños y comprometer ayudas. ¡Qué Gobierno!

MAITE TEJEDOR. Badajoz