Al alcalde de Santiagode Alcántara

No hace muchos días el alcalde de Santiago de Alcántara salía en los medios de comunicación como un caudillo héroe de la lucha contra incendios. Sólo cometió un grave error, dividir el pueblo entre los que lo votaron y no, olvidándose de mucha gente más, mucha más que de los pueblos de Santiago y Carbajo salieron de sus casas para combatir el fuego que venía de Valencia de Alcántara. No, señor alcalde, no fueron 20 o 30 personas las que acudieron a sofocar el incendio. Le ha cegado su afán de protagonismo. Hubo muchos obreros de nuestro pueblo que estuvieron apagando fuego y perdieron hasta dos días de trabajo. ¿O es que se ha olvidado de ellos?

En cuanto a la foto de familia que aparece en el periódico es muy significativa ¿los fue usted llamando o es que aparecieron por casualidad en la puerta del ayuntamiento? ¿No le parece sospechoso que la mayoría no estén en la foto?

No se puede tener tanta desfachatez, señor alcalde, y despreciar a tanta gente, incluida la de Valencia de Alcántara, que también procuraban que el fuego no entrase en nuestro término municipal, entre otras cosas, porque no se trataba de términos municipales, ni de salvar lo que cada uno cree suyo, sino de salvar lo de todos, sea donde sea y esté donde esté.VALERIANA CARBALLO ALDANA.Edil del PP en Santiago de AlcántaraLa limpieza enPlasencia

Una ciudad está sucia cuando los ciudadanos no respetan las normas. A qué viene ésto, se preguntarán. Desde hace unos días nos vienen bombardeando en las televisiones locales y la prensa con que Plasencia está sucia y que el servicio de limpieza no trabaja eficientemente. Pero... ¿nos hemos parado a pensar porqué está sucia nuestra ciudad? ¿No será que nosotros la ensuciamos?

Sacamos la basura antes de las diez de la noche. Dejamos las bolsas fuera de los contenedores, muchas veces por no levantar las tapaderas o mandar a niños que no alcanzan a las mismas. Muchos industriales sacan las basuras cuando quieren, no les importa que no halla recogida al día siguiente, llenando los contenedores de cartones, verduras o restos de pescado en mal estado, produciendo olores y mala imagen.

Se come y se bebe en la calle o terrazas y se tira todo fuera de las papeleras y contenedores; no olvidemos los famosos botellones que se organizan en cualquier punto de la ciudad (ferial, San Juan, jardines, Isla, etcétera) dejando las litronas, botellas o bolsas esparcidas por todo el recinto, con el consiguiente peligro ecológico e incluso físico, para el viandante.

Se orina o vomita en muchos puntos de interés artístico de la ciudad con la consiguiente mala imagen y olores para el sufrido visitante o vecino.

Qué me dicen de la eficacia de las brigadas municipales, que pagamos entre todos, y que, en muchos casos, deja mucho que desear con trabajos a medias, aceras en mal estado, rastrojos sin eliminar...

El ayuntamiento debe promover campañas de limpieza y no limitarse a criticar a la empresa y sus trabajadores, debe hacer cumplir las normas, tanto al ciudadano como al servicio y si alguno no hace lo que debe tiene que sancionar. Aunque se contrataran a 200 obreros más, si seguimos ensuciando esto seguirá igual. No es más limpio quien más limpia sino quien menos ensucia.CARMEN RIVERO VICENTE. Plasencia