Manifestación a favorde la ´montanera´

El motivo de esta carta es hacer algunas precisiones acerca de la noticia aparecida en ese medio el día 29 de diciembre, donde dice: "Protesta: ganaderos de Salvatierra de Santiago se manifiestan contra el PP", y me considero legitimada para ello, puesto que estuve presente en dicha protesta.

1.º La manifestación no estaba convocada contra el PP ni contra la alcaldesa, sino contra la política que ésta realiza, en este caso con respecto a la montanera. 2.º No sólo estábamos allí ganaderos, sino también ciudadanos de a pie que no tenemos ganado, pero que creemos en el desarrollo y bienestar de nuestro pueblo. 3.º Los manifestantes éramos, aproximadamente, más de 150, porque aquí nos conocemos todos, y sólo 3 ó 4 me eran desconocidos, que supongo serían los "acompañantes de Luis Cortés".

Y cuarto; creo que nadie puede autoproclamarse representante de la Asociación de Vecinos, puesto que yo soy la secretaria de dicha asociación, y puedo garantizar que legalmente (cumpliendo los estatutos) hace bastantes años que no funciona. Otra cosa es que su presidente siga pensando que representa a la asociación y lo utilice en beneficio propio.

FRUCTUOSA MORALES GALAN

Salvatierra de Santiago

Permisividad ante loscotillones ilegales

Como padre de dos jóvenes entre 18 y 20 años de edad y por tanto clientes de los cotillones de fin de año a celebrar esta noche y viendo el interés que se ha puesto en la campaña informativa sobre elegir los cotillones legalizados y ante la imposibilidad, por mi parte, de convencer a mis hijos de ello, es por lo que me atrevo a denunciar lo que todo el mundo ve (la cantidad de cotillones ilegales, no autorizados) y que sin embargo tienen la publicidad en la calle y en la prensa local.

Mis hijos, al igual que otros muchachos, no entienden o no quieren entender las consecuencias de la celebración de estos cotillones ilegales, con falta de seguridad, pues no tienen ni salida de emergencia, sobrepasado de aforo, etcétera.

En otras ciudades donde he vivido esto se controlaba; no entiendo cómo en Cáceres, con todo el follón que tienen de horarios y licencias administrativas, dejen pasar esto por alto y no hagan nada por impedirlo.

Nuestros hijos merecen una atención, un cuidado y el respeto de las leyes.

ANTONIO RODRIGUEZ GALAN. Cáceres

Las autorizacionespara fiestas fin de año

Según leo en el Periódico EXTREMADURA de fecha de ayer, día 30, se han autorizado cuatro cotillones en la provincia de Cáceres.

Y yo pregunto: ¿Y el resto de los cotillones anunciados y con las entradas vendidas, qué? Si los que usted, señor director general, y todo el mundo conocemos --no lo entiendo-- autorizan qué cotillones se pueden celebrar y cuáles no; y por otro lado, los que ni siquiera han solicitado autorización ¿quedan al margen de la ley? ¿En qué región vivimos?, Esto parece el Oeste en vivo, o mejor, Africa en directo.

Le deseo toda la suerte del mundo y que no pase nada. Pero así no podemos seguir. Así seguiremos siendo una región de tercera.

ANTONIO PUERTO GOMEZ

Arbolesde Navidad

Una vez que hayamos dejado atrás el 6 de enero, me gustaría que durante un minuto tomásemos conciencia de un nuevo símbolo navideño: el árbol de Navidad.

Si paseamos por las calles y plazas de nuestras ciudades y observamos a nuestro alrededor, podremos advertir que cada año predominan más los colores verdes y rojos de los abetos. Sin duda, dan un toque muy navideño y alegran la vista de los transeúntes, pero una vez que ha finalizado la campaña navideña, ¿cuál es el destino de estos árboles?

Bien es sabido por todos que la mayoría terminan su existencia en los vertederos municipales, debido a que sus dueños desconocen dónde transportarlos o porque son inexpertos en sus ciudades. Es una lástima que todos los años mueran cientos de abetos, teniendo una solución fácil al alcance de la mano: donar nuestro árbol al centro especializado donde se adquirió. Dichos centros se encargan, año tras año, de recuperar los árboles más malogrados. Unos de mis deseos para el 2004 es que, en las próximas Navidades, cuando un niño o comerciantes compren un árbol, se pregunten: ¿Y después del día 6, qué?

MARTA PEREZ MARIN. Plasencia