Se acaba de aprobar el cheque infantil, o sea, los 2.500 euros que me van a soltar del ala por tener un retoño, y además sin vetarme otras ayudas a las que ya podía acceder. Primero decir que el importe me parece totalmente insuficiente para lo que el evento del nacimiento de un hijo supone, sobre todo si nos comparamos con los ciudadanos de otros países de la Unión Europea en los que se tiene derecho a ayudas similares por los mismos conceptos, pero el camino más largo comienza con el primer paso. Hasta ahí todo bien, pero al leer la noticia en la que se da el resultado de la votación en el Senado me doy cuenta de una peculiaridad que me sorprende sobremanera, y es que resulta que tanto el PP como CiU han optado por abstenerse y argumentan para ello que la medida es electoralista, o sea que tanto los señores y señoras del PP como los de CiU consideran que el Gobierno quiere comprar mi voto para las próximas elecciones y creen los señores y señoras de los dos mencionados partidos que los que nos gobiernan han tasado mi voto y el de mi mujer en la cantidad de 2.500 euros exactamente. Pues la cosa no es así de simple, a no ser que piensen que los votantes son un montón de gallinas alrededor del dueño esperando a que les caiga un poco de trigo. Pero lo que sí me dan a entender es que en el caso de que ocupasen La Moncloa ya nos podíamos ir despidiendo de este tipo de ayudas, no fuera a ser que tachasen a sus inmaculadas señorías de electoralistas. También doy por hecho que a partir de ahora iniciarán una campaña para pedir a sus militantes y electores que vayan a tener PPitos y CIUitos, que se abstengan de solicitar la mencionada ayuda ya que esta ha sido creada con fines maquiavélicos y claro, si se abstienen ustedes en las votaciones bien seguro estoy de que los votantes, simpatizantes, militantes, o ustedes mismos si se encuentran en edad de engendrar o adoptar, también optarán por dicha abstención a la hora de cobrarla... ¿o no?

Ricardo Hernández Martín **

Cáceres