Escena A: Un hombre plancha una camisa en una cocina. Una niña de 7 años con pinta de sabionda observa la faena de su padre. Entra en escena la esposa de este, madre de la niña, y acusa al marido de engañarla con una vecina, algo que él niega. La mujer sale de escena contrariada y enojada. Termina la escena con una resabida frase de la niña, dirigida a su padre, que viene a decir que este no sabe mentir a su esposa. Escena B: Cuatro mujeres sentadas en un sofá hacen comentarios sobre el poder de fascinación de una de ellas sobre los hombres y su relación sexual con un determinado varón.

Son dos escenas de una serie de televisión. Se emite en horario nocturno, y como en casi todas las series de estas características, que tratan asuntos de adultos, existen personajes interpretados por niños, supongo que para captar televidentes infantiles.

Otras escenas, estas reales: Un niño de 3 años juega con una videoconsola, regalo de su papá por su cumpleaños sin que el niño la haya pedido. Un maestro que reprende a un niño por no haber hecho los deberes y posteriormente el padre del niño agrede al maestro por haber reprendido a su hijo. Un chaval de 12 años que a diario se queda solo en casa durante 5 horas porque sus padres están trabajando. Chicos a los que se les recuerda constantemente que los seres humanos tienen distintas categorías conforme a su condición, raza, género o inclinación sexual. Un joven de 18 años al que su padre le compra un coche a cambio de nada. Unos adolescentes ensucian fachadas de viviendas con aerosoles y son detenidos junto a otros que acaban de destrozar varios columpios de un parque, sólo son sermoneados para que no vuelvan a hacerlo. Muchos niños que nunca oyen la palabra ´no´, y muchos padres que siempre pronunciamos la palabra ´sí´.

Epílogo: Madres y padres preguntándonos por qué muchos niños y jóvenes son tan irrespetuosos y violentos.