WHway constancia de que han pasado por el aeropuerto catalán de El Prat algunos de los aviones sospechosos de intervenir en los circuitos aéreos descontrolados de la CIA. En Turquía confirman la llegada, procedente de Barcelona, de por lo menos un vuelo. En el aeropuerto barcelonés está acreditada la estancia de tres días de un avión para esos servicios, aunque sin indicios de que en esa escala transportara prisioneros. Antes ya habían sido citados aeropuertos de Mallorca y Canarias en relación con los vuelos de ida o vuelta hacia prisiones ilegales o centros de tortura norteamericanos ubicados en el extranjero. Bush ha utilizando a discreción instalaciones europeas en sus operaciones ilegales pero cada vez menos secretas contra el terrorismo. No se puede aceptar la angelical tesis de Condoleezza Rice de que la UE y la OTAN no tienen de qué preocuparse porque EEUU no viola la ley internacional y respeta la soberanía ajena. Sabemos que esto último no es verdad. Tampoco es correcta la condescendencia europea en este tema, porque es una complicidad antidemocrática por mucho que Washington haga una política de hechos consumados y ni siquiera pida permiso a los países a los que involucra en sus prácticas contra los derechos humanos.