Esta semana se ha celebrado en la Asamblea de Extremadura el Debate sobre la Orientación de la Política General de la Junta de Extremadura. Como cada año, durante dos días, se ha analizado la situación en la que se encuentra nuestra comunidad autónoma y hacia dónde queremos dirigirla.

Durante la primera jornada pudimos escuchar un discurso aburrido por parte de Guillermo Fernández Vara. Una intervención tediosa, poco más de una hora en la que transmitió de todo menos ilusión y ganas de trabajar por Extremadura.

No fue hasta la siguiente sesión, la del miércoles, cuando pudimos escuchar de boca del presidente del PP, José Antonio Monago, un discurso comprometido, de futuro y esperanza para nuestra tierra. Habló de blindar los principios constitucionales que, desde que gobierna Pedro Sánchez, se encuentran en serio peligro. Principios como la defensa de la unidad de España, en contra de la plurinacionalidad, la necesidad de continuar con la reforma de la financiación autonómica iniciada por Mariano Rajoy, e instó a que todos los partidos rechazaran el principio de ordinalidad y la asimetría, como fórmula para el reparto de la financiación.

Durante el debate, Monago se ofreció a acompañar a Fernández Vara a exigir a Pedro Sánchez que no cierre la central nuclear de Almaraz, ya que ello supondría la ruina de toda una comarca.

Fueron 97 propuestas, de un total de 111 que presentó el PP, las que salieron adelante. Propuestas para mejorar la situación de los extremeños en su conjunto. Por ello, me parece increíble que propuestas como la defensa de la unidad de España, oponerse a la subida de impuestos pretendida por Pedro Sánchez o la garantía del derecho a elegir la educación religiosa de sus hijos, hayan sido rechazadas por PSOE y Podemos.

Igualmente me llama poderosamente la atención que los socialistas, con la complicidad de Podemos, se opusieran a impulsar la Estrategia Industrial, que supondría la paralización de la línea AVE/Altas Prestaciones, la mejora de la red convencional y la recuperación del ferrocarril Vía de la Plata.

Es de vergüenza como Vara no oculta sus ambiciones personales, anteponiéndolas, una vez más, al interés de los extremeños. Jamás el PP ha votado en contra de cualquier propuesta que suponga impulsar el tren en Extremadura, gobernara quien gobernara.H

*Asesora jurídica y diputada del PP.