Celebramos hoy el Día Mundial de los Derechos del Consumidor, efemérides que se inició por el impulso de Consumers International , federación mundial que agrupa a 250 organizaciones de consumidores y se halla presente en 115 países. La elección del día, curiosa o intencionadamente, se ha atribuido a la coincidencia en fecha con una declaración del presidente, John F. Kennedy , en 1962, ante el Congreso de EEUU, en la que se refirió a cuatro derechos de los consumidores: seguridad, información, elección y a ser escuchado.

Anecdótico o no, aquella enunciación básica y una paulatina sensibilización de los ciudadanos impulsó que, en la España de la transición, la defensa de los consumidores y usuarios y su garantía por parte de los Poderes Públicos, se incluyera en nuestra Constitución, dando paso ulteriormente al desarrollo normativo básico del Estado y al correspondiente a cada comunidad autónoma cuando estas lo consideraran oportuno. En Extremadura, es a partir del año 2001 cuando se aborda el desarrollo legislativo en esta materia, adaptando a las peculiaridades y a los intereses de nuestra región los principios constitucionales. Se trata de la Ley 6/2001, de 24 de mayo, del Estatuto de los Consumidores de Extremadura.

XEL CONSUMIDORx es el destinatario final de bienes, productos y servicios, englobándose en ese término tanto a quienes adquieren o usan bienes o productos como a quienes utilizan servicios. Pero, pese a la aparente simpleza de la definición, la moderna concepción del mundo como un mercado universal, nuestra pertenencia a las instituciones y mercados europeos y la aparición y rápido desarrollo de nuevas tecnologías e internet, amplían notablemente la oferta y la capacidad de elegir, pero también aboca al consumidor a un mercado cada vez más complejo en el que, además de medidas de tipo jurídico, deben existir medidas educativas, económicas y éticas, que informen y formen consumidores conscientes, críticos, solidarios, responsables y comprometidos.

Aprovechando la celebración de este Día Mundial de los Derechos del Consumidor, debemos hacer una llamada también a las empresas para que vean en la protección de los consumidores una oportunidad a aprovechar y no una amenaza molesta. Y esto debiera ser una tarea de todos, siendo cada vez más importante, además del impulso de las administraciones, la presencia activa de la participación organizada y responsable que los ciudadanos realizan a través de las organizaciones del ramo. Los consumidores, cada día más, conocen sus derechos y comienzan a ejercerlos directamente frente a las empresas. Afortunadamente ya no hay miedo a reclamar ni a solicitar las hojas para formular reclamaciones. En este sentido, internet ha sido un excelente foro de expansión que hoy temen y respetan todas las empresas, sabedoras de que cualquier desafuero puede ser difundido, con las consecuencias pertinentes.

Pero, además, el Día Mundial de los Derechos del Consumidor nos brinda una oportunidad para reflexionar sobre los hábitos inadecuados de consumo que inciden negativamente en los sectores más influenciables y débiles de nuestra sociedad. Podíamos decir que el consumismo es una moderna enfermedad del consumo y que es necesario alertar de los efectos negativos de una publicidad tendente a crear necesidades innecesarias cuya finalidad es someter al consumidor al dictado de las compañías que ya no producen para cubrir las necesidades del consumidor sino simplemente para vender.

En las sociedades avanzadas, los consumidores deben conocer sus derechos y limitaciones y saber controlar los impulsos compulsivos de las tentaciones publicitarias.

Si este día sirve al menos para que podamos reflexionar, ya se habrá alejado de las celebraciones al uso. Consumir con responsabilidad es el objetivo que nos une en este día, pues todos somos consumidores.

*Concejal delegado del Area de

Consumo del Ayuntamiento de Badajoz.