TSte llama Theóphile Mboma , tiene diecisiete años y es de Bakombo, una pequeña aldea de Camerún. Durante tres años fue a una austera escuela que abrieron en su aldea unos misioneros españoles. Estos le enseñaron a escribir y a leer; a sumar, restar, multiplicar y dividir; en qué lugar del mundo está Africa, y en qué lugar de Africa está Camerún; en qué lugar del mundo está Europa, y en qué lugar de Europa está España. Tuvo que dejar la escuela a los catorce años porque su padre le necesitaba para que le ayudara a pastorear el escaso ganado de la familia y a cuidar su pequeña plantación de maíz. Tiene dos hermanas más pequeñas, Zahualema , que acaba de cumplir dieciséis años y Liuma de trece. Zahualema se casará pronto con Valery Abega , su mejor amigo, que se fue a trabajar a España, pero ahora está pasando unos días en Bakombo. Theóphile y Valery se reúnen todos los días al atardecer y Valery le cuenta cosas de Europa, algunas buenas, otras no tan buenas. Casi todos los días juegan partidillos de fútbol con otros chicos de la aldea, Theóphile suele jugar descalzo, pero ahora se calza unas botas de fútbol que le ha traído de regalo su amigo Valery de España. Valery dice que ha visto jugar varias veces a Eto´o . A Theóphile le gustaría ser como Eto´o. Valery sabe que su amigo Theóphile sueña con ir a España cuando sus dos hermanas se casen y, al igual que hace él, mandar dinero a sus padres para que prosperen.

Valery trabaja en España en la construcción. El encargado de la obra tiene un hijo del que se ha hecho muy amigo que se llama Daniel . Es un chico muy simpático, aunque bastante alocado. Estudia primero de arquitectura. Algunos fines de semana Valery ha salido con él a tomar alguna copa. Casi siempre han terminado haciendo botellón en alguna plaza de la ciudad. Valery no entiende esa forma de divertirse, pero la comparte porque sabe que para integrarse tiene que aceptar las costumbres españolas. Daniel y él suelen jugar algunas tardes al fútbol en una cancha municipal. Daniel calza unas botas de fútbol muy caras que le regalaron por su cumpleaños. Cuando terminan de jugar, acostumbran a ir a cenar a una pizzería. Daniel dice con frecuencia que la vida es muy aburrida, y a veces Valery piensa que Daniel no sabe con qué soñar.

*Pintor