Escritor

El trabajo de la Guardia Civil en Málaga me parece tan excepcional que hay que ensalzarlo, porque en el espíritu de la indagación hay un progreso tan notable de este cuerpo de la seguridad del Estado que sale de lo que ha venido siendo la normalidad desde su creación. La lectura que el hecho tiene colateralmente es que los sindicatos, a veces, son una pesada carga que, en el caso de la policía, lejos de ayudarla le puso desde sus inicios plomo en las alas. Venía la policía de un pasado muy negro, desde el franquismo, y la aparición de los sindicatos no le ha beneficiado. Las cosas, a veces, son así de duras. Hay que tener en cuenta que el papel de los sindicatos deja bastante que desear, y el documento ése que el PP y CCOO firmaron para manejar Caja Madrid, produce tal horror que hace pensar en todo. La Guardia Civil en ese aspecto se ha mantenido incólume, y la sociedad, hoy, lo tiene que agradecer. El caso de Málaga así nos lo sugiere, aunque haya tenido un mal comienzo con esa pobre mujer procesada más que por asesina, por lesbiana, que es lo que hay en el fondo de todo.

Que por un calzoncillo se saque el ADN del presunto criminal es importante. Lo que ya te deja menos tranquilo es la importación que hemos hecho y seguimos haciendo de criminales. Y la Costa del Sol parece que está lleno de todos y los más lujosos, que está pidiendo a gritos un procesamiento de datos en profundidad de todo cuanto llega a España. Desgraciadamente las cosas son así y si no te defiendes puedes terminar en un basurero pasto de las aves carroñeras. Todo esto se debe, sobre todo, a la evolución de la España desde el año 36, cuya coda final es la enseñanza, con la aparición de los Guerrilleros de Cristo comprando colegios, cuyos primeros padres son el ministro Acebes y Ana Botella... Pues que aquí y ahora todo es posible, hasta que importemos criminales de la Gran Bretaña, por eso a la Guardia Civil hay que pedirle que siga progresando, aunque hubo un día que me confundieron con un capo de la mafia de la droga en Zafra cuando fui a dar una conferencia.