WLw os presidentes de España y Portugal, José Luis Rodríguez Zapatero y José Sócrates, reafirmaron ayer en Badajoz el compromiso de sus gobiernos sobre las fechas de puesta en servicio del tren de Alta Velocidad Madrid-Lisboa, es decir, según el Gobierno español en el 2010 --aunque año a año en los Presupuestos del Estado figuren fechas posteriores de terminación de algún tramo-- y según el Gobierno portugués en el 2013. En cualquier caso, que la reafirmación de un compromiso sobre las fechas de terminación del AVE, que por otro lado son las de la anterior cumbre de Evora, figure entre las declaraciones de los dos mandatarios es un dato que ilustra sobre los resultados del encuentro. Y es que la 22 Cumbre Ibérica de Badajoz se ha saldado con más ruido que nueces para ambos países, y para Extremadura.

Las informaciones previas ya apuntaban a que el encuentro se resolvería con más declaraciones acerca de las buenas relaciones existentes que avances sobre asuntos que hagan progresar la cohesión entre España y Portugal. El propio proyecto de estación internacional del AVE Badajoz-Elvas, difundido algo así como "el acuerdo estrella" del encuentro, particularmente para Extremadura, ha resultado ser una sorpresa porque, desde que en la Cumbre de Figueira del 2003 se empezó a hablar de la línea ferroviaria para unir las dos capitales ibéricas por Alta Velocidad la fórmula de la estación internacional para Badajoz y Elvas ha estado en la mente de todos porque era la única que se ha barajado y, sin embargo, hasta ahora los dos gobiernos no se han decidido a estudiarlo con vistas a presentar un proyecto para acceder a los fondos europeos que financian infraestructuras transfronterizas. Nunca es tarde si sirve para avanzar, pero en buena lógica cabe pensar que han tardado mucho en acometer ese proyecto. Mayor tardanza en el caso del Gobierno español porque es el que tiene plazos más cortos: su compromiso de que el AVE llegue a Badajoz cumple dentro de cuatro años. ¿Es realista pensar que desde ahora hasta el 2010 hay tiempo suficiente para elaborar un proyecto de ese calibre, que tiene que empezar por decidir los terrenos, se va a acometer y entrar en servicio?

De otra parte, tampoco se ha avanzado significativamente en la conexión portuguesa por el norte extremeño. La autovía Plasencia-Monfortinho, incluida en el próximo plan regional de autovías y que se empezará a ejecutar el próximo año, no se sabe cuándo tendrá continuidad hasta Castelo Branco. En los últimos 12 meses este proyecto portugués apenas ha avanzado: el Gobierno luso afirma que durante este año se han hecho estudios de tráfico y "se prevé" el inicio de "un estudio previo" durante el primer trimestre del año próximo.

Un resultado positivo del encuentro es el acuerdo para elaborar una base conjunta de Protección Civil y para que los bomberos de ambos países puedan adentrarse en el otro hasta 15 kilómetros --en lugar de 5, como hasta ahora--, para combatir un incendio. Este compromiso se traduce en seguridad para Extremadura, puesto que lo faculta para defender mejor el territorio regional cuando lo amenace un incendio originado en Portugal.