La que interpone en su separación matrimonial, o va a interponer, según el diario Hoy el ciudadano L. M. T., a la sentencia (lástima que no fuera también publicada en Hoy ) habida contra este probo ciudadano y fontanero eximio, al que le ha colocado el juez una pensión de 1.500 o 1.800 euros, según los casos, del trabajo temporal que desempeña la esposa, y aquí está la madre del cordero de la cosa, que a este paso se van a separar varios miles de mujeres, si el acoso y derribo después te compensa con un sueldo de capitán en Irak por lo menos. Y es que el juez no se anduvo con remilgos a la hora de buscarle los fondillos a M. T., hermano del conocido y no menos eximio representante del PP, que no se sabe si después de esa pensión de oro, no ha tenido en cuenta también los ingresos del político de lujo para decidir una pensión, que a estas horas más de una estará madurando. Pues el juez no ha tomado mejor acuerdo para dar con ese filón que una declaración que M. le hizo a un banco para conseguir una hipoteca, donde ganaba o ingresaba hasta 50.000 euros anuales. Hombre, por Dios, señor juez, con lo fácil que es engañar a los bancos diciéndoles que ganas lo que no ganas, y usted se deja llevar por esta malhadada costumbre española de no decirle la verdad nunca a nadie. Y lo más grande no es la perpéntica noticia, sino que el diario pacense no encuentra mejor lugar donde ponerla y la sitúa junto a la foto de la presentación de las candidaturas del PSOE en Badajoz, que es un poco como equiparar los hechos. Por un lado el fontanero descubierto, que es como poner en un brete a la fontanería, y al lado, poner por los suelos la candidatura al Congreso y al Senado, que te pone un poco como de fontanero en los madriles. Esto va a dar lugar a que salgan más casos ilustres, como alguno que yo sé, pues Badajoz da para estas historias y varios miles más.