TZtapatero , como siempre, en el centro de las presiones y de las tormentas políticas. Rajoy le presiona para que la verificación del alto el fuego de ETA consista en comprobar que esa organización está decidida a entregar las armas y a desaparecer del mapa. Otegi le presiona para que el Estado deje de perseguir a los terroristas y para que los fiscales y jueces hagan dejación de sus obligaciones, al tiempo que Batasuna sea legalizada inmediatamente. El presidente del Gobierno tiene que mantenerse incólume y resistente a todos los vientos huracanados. Las presiones de doble dirección que intentan atosigarle son igualmente insensatas e irracionales y sería suicida si él cediese a cualquiera de ellas, ya que eso supondría o bien la muerte del proceso de paz antes de nacer o bien la disolución del Estado de Derecho. Zapatero sabe muy bien que su gran baza ha de ser la prudencia y la flexibilidad, nunca la cesión ante exigencias disparatadas.

En otro plano muy distinto, es algo de lo que le sucede con el Estatuto de Cataluña y, en pequeña medida, con el de Andalucía. La dirección de Esquerra Republicana se ve impelida por sus bases a pedir el NO en el referéndum estatutario, lo mismo que el PP pero por motivos diametralmente contrarios. ¿Hay mejor prueba de que la posición de centralidad de Zapatero es la más razonable, la más sensata, la única viable? Esa posición aparece por todas partes, incluso en el contencioso provocado por la nacionalización de los hidrocarburos por el Gobierno de Bolivia. Aquí la izquierda le presiona para que aplauda una medida otrora emblemática de esa ideología, al tiempo que desde la derecha se le reprocha que no haya parado los pies por la fuerza, no sé con qué fuerza, a ese Evo Morales condenado de antemano incluso antes de haber ganado las elecciones de su país.

Zapatero, sometido de nuevo a la doble presión, se esfuerza para defender los intereses españoles, sin aplaudir nada, sin mandar allá a los Tercios de Flandes, simplemente enviando una delegación negociadora y luego entrevistándose dentro de unos días con Morales. Y así siempre.

*Periodista