Que un derbi extremeño pueda considerarse de alto riesgo puede presentarse como desmesurado; pero para mesura, o dicho de otra forma ´cachaza´, la demostrada ayer por las fuerzas del orden a la hora de abortar los enfrentamientos entre un grupo de aficionados en la grada cacereña. En un partido de máxima rivalidad, las hinchadas podrán ir unidas pero nunca revueltas, que luego pasa lo que pasa.