Los efectos de la crisis han sido terribles, pero si nuestra nación no hubiera estado tan debilitada económicamente por el brutal saqueo de sus arcas, y el megadespilfarro de sus recursos por gentuza que habíamos puesto la confianza, el impacto que ha sido de una magnitud incalculable hubiera sido menos doloroso por los muchos millones de personas que lo hemos sufrido de diferentes formas que han afectado nuestras vidas. Incertidumbre, mucho sufrimiento y agravamiento de las enfermedades por la larga espera de atención médica, tensión, discusiones, inquietud y malestar familiar por la disminución del nivel de vida, deficiente calidad en la enseñanza y escasa preparación de la juventud para labrarse un futuro mejor. Y viva la vida de gentuza de guante blanco o simplemente chorizos gozando de lo robado en libertad, por haber prescrito sus delitos. Es tanto y de una gravedad extrema el daño causado por estos irracionales, que ni con cadena perpetua de trabajos forzados lo pagarían, pero ahí están los abogados de "élite" que tergiversan con toda desfachatez las leyes, y los jueces que aplican sus propias decisiones que nada tienen de justicia, para que los capitostes de mafias y bandas organizadas que proliferan en la política sigan gozando en libertad de herencias y premios. Necesito creer que son muchas las personas que como yo siente repugnancia de lo que estamos viviendo, y una profunda tristeza el ver la justicia escarnecida por sus propios servidores sin ninguna consecuencia.
