El titular es todo un reproche. El Barómetro de hábitos de lectura y compra de libros de la Federación de Gremios de Editores de España 2009 sitúa a Extremadura en último lugar en cuanto a población lectora. Las campañas en fomento de la lectura, bibliotecas escolares y demás zarandajas, incapaces de transmitir entusiasmo lector fracasan en su empeño por abrir el abanico de placer, diversión, evasión, rebeldía, sueños, fantasía y conocimiento que supone la lectura. Hace poco pregunté a los chicos qué harían ellos para fomentarla. La mayoría leen poco pero cuando lo hacen --en clase-- se divierten. Es un hecho. Aquel proponía menos ordenador, menos televisión y más publicidad lectora. ¿O es que sin publicidad se venderían los calzoncillos de Calvin Klein a 50 euros? Uno sugería que se leyera más en el instituto y se explicara menos, otro presentar los libros en formato informático y la chica lista de la última fila, leer por costumbre diez minutos todas las noches. Alguno, pasota y jocoso preguntaba ¿quién ha dicho que la juventud no lee? No lee los muermos que pretendéis los profes. Yo, profesora, claro, creo que no supuso estímulo alguno haber eliminado de los exámenes de selectividad las preguntas sobre lecturas obligatorias pues la necesidad de aprobar ayudaba a adquirir el hábito. Aunque por obligación. Eliminar prácticamente la historia de la literatura del currículum tampoco ayudó. Llámenme interesada. Mas también me pregunto: ¿No habrán confundido los editores leer con comprar? ¿Cuenta igual La noche de los tiempos que Ojos azules ? ¿Hablamos de libros vendidos o de páginas leídas? ¿Y los ejemplares prestados en las bibliotecas o por un amigo, un hermano, la suegra? ¿Es un barómetro interesado de ventas o de lectura real? Comprar un libro no significa leerlo. Se puede leer sin comprar ¿Cómo se miden los hábitos? Creo que Extremadura lee más de lo que refleja el informe. Menos de lo que debería. Porque leer nos hace más libres y más sabios, dignifica el ocio, pone cascabeles a la rutina y mantiene alerta. Quien lo probó lo sabe.