El Villarreal, club de fútbol cuyo propietario es Fernando Roig , ha tomado una decisión por la que merece un reconocimiento: los socios que se queden en paro no pagarán el abono y mantendrán su asiento la temporada que viene. El club mantiene una estrecha comunión con su ciudad, de 50.000 habitantes, de los que 20.000 son socios.