Pablo Iglesias , líder de Podemos, está concediendo muchas entrevistas últimamente. En un plazo de un mes, tres periodistas de los que se podrían considerar "cabrones" --palabra utilizada por el dirigente de la coleta para denominar a los periodistas asediadores-- han tenido la oportunidad de tirarle de la lengua. Pero sólo le han sacado la mitad. Durante estas entrevistas, realizadas por Jordi Evole , Ana Pastor y Pepa Bueno , en sus correspondientes programas de televisión y radio, el entrevistado Pablo Iglesias ha contestado algunas preguntas con claridad y firmeza, otras de manera vacilante, y en otras simplemente se escurrió para dejar que los televidentes o radioescuchantes se contestaran a sí mismos.

Los políticos últimamente son muy escurridizos cuando se les pregunta lo que no les gusta que se les pregunte. Bueno, todo hay que decirlo, algunos ni siquiera dan opción a que se les pregunte, o colocan una tele plasma que no admite preguntas. En fin, que pronto los periodistas "cabrones" tendrán que hacer un curso que se titule algo así: "Cómo entrevistar a un teleplasma y no correr el riesgo de dejar de ser un periodista cabrón".

Pero volviendo a Pablo Iglesias . Tras el éxito de Podemos en las Elecciones Europeas, muchos políticos antagonistas reprocharon a los medios de comunicación haber hecho una campaña gratuita a la nueva agrupación política. Por entonces, los dirigentes de Podemos lanzaban unas proclamas y pretensiones muy relevantes que a día de hoy algunas han perdido contundencia o están a la espera de ser modificadas. Da la sensación de que Podemos no tiene claro su proyecto. Pero a la formación de Pablo Iglesias no se le puede pedir que no sea populista cuando el resto de los partidos lo son. Que presente un programa que pueda cumplir al cien por cien, cuando ningún partido que ha gobernado lo ha hecho. Que no tenga desavenencias internas, cuando todos los partidos las tienen. Quizá Podemos termine siendo flor de un día, pero puede que deje un perfume penetrante que ayude que terminar con el actual olor a alcantarilla.