TMtás de cincuenta mil flores adornan Badajoz y, encima, sale un desalmado y dice que es un dispendio. Una ciudad sin flores es como un cruce sin estatua o una rotonda sin fuente. Badajoz necesita flores porque no tiene muchos monumentos, dice la concejala responsable antes de viajar a Versalles para darse cuenta de lo que acaba de decir. Una ciudad con monumentos no tiene por qué estar desflorada. Badajoz tiene monumentos, dicen los Amigos de Badajoz, lo que pasa es que esos monumentos están cubiertos por ramajos y yerbajos. Tiene monumentos muy grandes y hermosos, como el Carrefour o el Corte Inglés, y están rodeados por flores y árboles.

Una avenida de Carolina Coronado sin Carolina, es una estupidez. Los vecinos de la Estación piden una estatua de Carolina y no piden un imposible. Los vecinos del Paseo Fluvial no pidieron estatuas de conquistadores y tienen unas pocas. ¿Por qué no ellos? Los vecinos de Carolina Coronado dicen que la fuente les da entidad y categoría. Y tienen razón, pero no es cosa de darle entidad y categoría a cada barrio con una fuente porque pareceríamos Venecia y, además, el CD Badajoz no es de los clubs que más ligas gana, con lo que lo de bañarse en las fuentes no se estila.

Los vecinos del Cerro del Viento no han pedido aún nada pero lo tienen difícil porque he escuchado en una tertulia que anda un artista patrio ideando una fuente con un gran ventilador en medio para esa barriada.

Más de cincuenta mil flores adornan Badajoz y cuando estallan en sus colores, las consultas de alergias se ponen de bote en bote y por eso hay un artista patrio ideando una estatua con un hombre estornudando para que orne la rotonda del Infanta Cristina.

*Dramaturgo