TAtl amparo del rimbombante nombre de fundación se cobijan organizaciones de todo tipo: altruistas, divulgativas, culturales...y hasta deportivas. Muchas llevan a cabo tareas dignas de reconocimiento y teóricamente no tienen ánimo de lucro económico (el político o electoral es otra cosa). Una de ellas recibió millonarias ayudas desde las arcas públicas para dedicarse a sembrar de ideas el mundo y nos ha plasmado uno de sus más recientes frutos en 14 minutos de vídeo. El anterior presidente del Gobierno reaparece encarnado en el personaje cenital del segundo Aznar , aquél que ya no hablaba catalán en la intimidad sino inglés macarrónico con los pies sobre la mesa, sin escrúpulos para bombardear poblaciones o repartir terror bélico desde unas islas en el Atlántico.

Rebatir el panfleto no merecería una línea, pero sí habría que preguntarse si los autores del vídeo de la FAES saben que mienten o si ya han llegado a ese estadio en que uno acaba por creerse las falsedades que fabrica. Quienes votaron el 14 de marzo eran tan adultos como los que dieron al PP el poder absoluto en el 2000. No estaría de más que esta fundación organizara un simposium sobre el concepto de autocrítica: más que útil, sería imprescindible.

*Profesor y activistade los Derechos Humanos