Corren malos tiempos para el espectáculo en Extremadura, según se desprende del informe que ha elaborado la Sociedad General de Autores (Sgae), en el que, entre otros datos, se indica que las salas de cine de la comunidad han perdido más de 350.000 espectadores en solo dos años o, en el caso de las representaciones teatrales, la crisis es mayor con un casi 40% menos de público en este mismo periodo.

El estudio señala que estos sectores han sido especialmente sensibles al auge experimentado por la piratería y la mejora de los sistemas de reproducción audiovisual caseros, lo que ha motivado un cambio de comportamiento de un espectador que se ha decantado por la comodidad del hogar.

Sin embargo, los datos pueden resultar más alarmantes de lo que en realidad son, ya que la Sgae, para conocer la actual situación del cine y el teatro, toma como referencia el 2001, año en el que se registró un récord histórico de espectadores muy difícil de igualar. De otro lado, es bien cierto que el cine está sometido a la gran presión que supone la reproducción ilegal de copias a escala industrial y esto sólo se podrá combatir a través de medidas policiales. El cine y el teatro en Extremadura están en horas bajas, según la Sgae, pero continúan siendo alternativas reales al ocio.