XLxos argumentos universales para oponerse a las regulaciones para la prevención del tabaquismo son redundantes y se pueden resumir en las siguientes afirmaciones: No son necesarias; Van a ser imposibles de cumplir y van a perjudicar los negocios. En esta línea argumental los hosteleros de este país han salido a la luz pública alegando futuras pérdidas de 20.000 puestos de trabajo, 1.600 millones de euros y caídas de la clientela del 8%. Sin embargo la cuestión es si algo similar ha ocurrido en los numerosos países en que este tipo de regulaciones u otras más estrictas han entrado en vigor en los últimos 10 años. Entre estos lugares tenemos los restaurantes del Estado de California (1995) los bares y restaurantes de la ciudad de Nueva York (1995), los bares y restaurantes de Columbia británica (2001) los pubs y restaurantes de Irlanda, Noruega, Italia y Suecia (2004-2005).

¿Ha ocurrido algo semejante en estos países? ¿Qué decían los augurios? En California, las campañas de alarmistas de la hostelería anunciaron pérdidas del 30% del volumen de negocio. Sin embargo en California el negocio hostelero aumento su facturación entre 1995 y 2000. En la ciudad de Nueva York los augurios fueron semejantes pero los beneficios de los hoteles y el turismo en Nueva York aumentó entre 1995 y 1999 según la New York City Convention & Visitor´s Bureau. En ese mismo periodo los beneficios declarados al fisco por los propietarios de bares y restaurantes de la ciudad de Nueva York se incrementaron en un 9%. Mientras tanto, la prevalencia de tabaquismo en esta ciudad descendió un 11% según datos de Instituto del Cáncer Roswell Park . Entre 1995 y 2000 se crearon en la ciudad de Nueva York 12.000 puestos de trabajo netos en la hostelería mientras en el resto del estado se perdían puestos de trabajo a pesar de no haber leyes reguladoras. En Columbia Británica (Canadá) la prohibición no afectó negativamente las tendencias estructurales en los bares y cafeterías en el periodo 2001-2003 observándose un repunte de beneficios tras pérdidas en los 3 años anteriores a la ley. En Europa según la sección belga de HORECA (Organización internacional del sector de hoteles, restaurantes y cafeterías) publicó en la prensa que una ley parecida a la irlandesa ocasionaría la pérdida de 20 a 40.000 puestos de trabajo pero según la página web de la patronal del sector sólo trabajan 14.183 personas en los bares belgas. La industria hostelera de Luxemburgo sentenció en una rueda de prensa: "Es un hecho que los pubs de Irlanda han perdido un 20% de sus beneficios". Pero según datos de la publicación Smoke Free Europe makes economic sense de junio de 2005 la caída de la facturación en Irlanda un año después de la aplicación de la ley en mayo de 2005 fue del 3.3%, sin embargo en los años anteriores a la ley la caída fue de 4,4% en 2004 y del 4,2% en 2003. Según los expertos la caída de las ventas en Irlanda y otros países obedece a una razón muy simple que no tiene nada que ver con las regulaciones del tabaco: la gente compra las bebidas en las tiendas y la consume en su casa o en la calle en mayor medida que años atrás. El efecto de la ley reguladora del uso del tabaco Noruega en la facturación de bares y restaurantes ha sido neutro según evaluaciones independientes publicadas en mayo de 2005. En general el 76% de los noruegos han seguido acudiendo a los negocios hosteleros igual que antes de la ley, mientras un 12% han acudido menos y otros 12% han acudido más. Es decir, por cada cliente que pierden ganan uno nuevo. Puesto que la mayoría de noruegos son no fumadores (75%) lo normal es que los negocios vayan al alza en vez de a la baja. Por otra parte en este mismo país el 74% de la población tenía la percepción de que habría conflictos con la entrada en vigor de la ley mientras que después de su aplicación sólo el 13% de los noruegos siguen teniendo esta percepción. En 2003 investigadores australianos y norteamercianos revisaron todas las evaluaciones de los efectos de las leyes del tabaco en la hostelería encontrando sólo 21 estudios independientes, rigurosos y fiables. No había un solo estudio que demostrara prejuicios para la hostelería.

Ante esta disparidad entre los datos reales y los alarmismos infundados de los hosteleros cabe hacerse algunas preguntas: ¿Qué clase de compromiso tiene los hosteleros con la industria del tabaco?, ¿acaso es la venta de tabaco el negocio principal de la hostelería?, ¿por qué actúan de fuerza de choque de la industria tabaquera? La regulación del uso del tabaco en la hostelería es imprescidible para proteger la salud de los trabajadores, necesaria para proteger la salud de los clientes puesto que el humo de tabaco es un agente nocivo y cancerígeno reconocido, se están clumpliendo las leyes en todos los países (incluso en Italia) y no perjudica los negocios de sus dueños. ¿Puede considerase razonable la posición del sector hostelero español ante la nueva ley del Gobierno de España?

*Secretario del Comité Nacionalde Prevención del Tabaquismo (CNPT)

Coordinador Nacional del Areade Tabaquismo de la Sociedad

Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR)