¡Es asombroso! Ahora para viajar a España, los venezolanos necesitamos una carta de compromiso o algo así (un venezolano radicado en ese país debe solicitarnos y hacerse responsable por nosotros), de lo contrario no podremos ir a España.

Lo que son las cosas de la vida, ahora se nos exige, cuando nosotros siempre les dimos la bienvenida a cientos de miles de españoles que emigraron hacia nuestra nación y se le permitió trabajar y vivir donde y cuando quisieran.

De hecho, hoy todos ellos conviven con nosotros, aquí están aún. Se casaron, hicieron familia, prosperaron, se enriquecieron y jamás, a nosotros los venezolanos, se nos ocurrió repudiarlos, acecharlos o denigrar de ellos como hoy en día lo hacen con los venezolanos, y con los latinos en general radicados en España (que son asediados por grupos racistas anti-latinos).

Dónde está su bondad, su generosidad o simplemente su agradecimiento, hacia un pueblo y hacia una nación que recibió a sus compatriotas como hermanos, y que les brindó todo para que aquí prosperasen y fuesen felices? ¡Así nos pagan hijos de España! ¡Así nos devuelven el cariño y la amistad que siempre les brindamos a sus hijos!

Eso es ser hermanos; ayudar al otro cuando lo necesita. Nosotros lo hicimos. Ahora que ha sido vuestro turno, que muchos de nuestros compatriotas venezolanos han salido casi huyendo de Venezuela (debido a la situación política), así nos devuelven el servicio prestado.

Hablo a los que así se comportan y, sobre todo, a su Gobierno, que ha implementado medidas para restringir la llegada de venezolanos a vuestras tierras.

Cada quien es libre de hacer lo que desee, cada nación y gobierno lo es. Sólo deseo recordarles, desde aquí, desde nuestra amada Venezuela, lo que nosotros, los latinos, los inservibles , hicimos por cada uno de vuestros compatriotas que vinieron a nuestras tierras, sólo eso.

Edwin Parada **

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