La recuperación del patrimonio histórico puede suponer para el barrio cacereño de Aldea Moret una inyección económica superior a los once millones de euros de aquí al 2006. La rehabilitación de las antiguas instalaciones mineras, junto al rico legado arquitectónico de su ciudad amurallada, se ha convertido en una de las principales bazas en la carrera hacia la capitalidad cultural europea, según puso de manifiesto ayer el propio alcalde, José María Saponi .

La adecuación del antiguo edificio del Embarcadero como centro social, formativo y cultural; el proyecto de creación de un gran centro de ferias y exposiciones o la rehabilitación del inmueble que abriga la mina de La Abundancia componen la mayor inversión realizada hasta ahora en Cáceres para la recuperación del patrimonio. Para llegar aquí ha sido necesaria la participación y colaboración de las distintas administraciones, lo que va a posibilitar la regeneración urbanística de una de las zonas socialmente más vulnerables de la comunidad extremeña. Con estas actuaciones se ha dotado a Aldea Moret de un protagonismo especial de cara al 2016, el proyecto de futuro más ambicioso de una ciudad que debe seguir en el empeño de la integración, pero a todos los niveles.