Durante el fin de semana he estado delante de televisor para ver el homenaje al Ejército de España, como pacense que hace 45 años dejó su ciudad.

Ha sido un honor para mí que el Ejército haya pasado con todos sus honores por las calles de la ciudad que me vio nacer y crecer hasta mis 20 años.

Me he sentido honrado con mi Ejército, pero parece ser que algunos quieren que sea solo el suyo, como la España del dictador, y aprovechan nuestro Ejército para abuchear a los ministros del Gobierno. Lamentable espectáculo el que dieron delante de los Reyes y del presidente de la Junta de Extremadura. ¡Qué poco saben vivir en democracia! Yo, que me siento de los vencidos del 36, pienso que el Ejército me representa como español que soy, y si hoy estuviera en el Estado otro Gobierno distinto al que hay, sería mi Gobierno.

No sé cuantas personas fueron los que gritaron contra los ministros y el presidente de la Junta, pero fueran los que fueran demostraron como son, unos hipócritas que desearían no ver desfilar a nuestro Ejército para unos y para otros, para los vencedores y para los vencidos.

Los que nacimos en los años cuarenta en nuestra querida ciudad y un día la dejamos porque queríamos vivir en libertad, siempre estará en nuestros corazones, a pesar de esos seres que siempre nos callaron nuestro sentir de extremeño.

José Hernández Arellano **

Barcelona