EL CASO DE FABIO ASENSIO

Al coordinador de la

Asociación de Trasplantes

Constancia García Mateos

Madre de un discapacitado

Me causó mucha tristeza ver de nuevo cómo se da una opinión unilateral.

Ignoro si usted es, médico, administrativo, perito agrónomo, cantante o torero; o qué datos clínicos tiene usted sobre mi hijo, porque los que yo poseo, no aparece por ninguna parte un solo dato válido para negar el transplante; únicamente unas cuantas opiniones subjetivas, personales y claramente discriminatorias.

Al parecer usted está en un escalafón muy alto, socialmente hablando; pero, para conseguir ese ascenso, ha tenido que ir soltando lastre, tirando cosas como: la honestidad, la ética, la moral, la solidaridad, la humanidad, etcétera.

Señor coordinador, debe saber que nosotros, las personas sencillas, nos nutrimos precisamente de lo que usted va dejando atrás, y en torno a esos valores construimos nuestras vidas.

Quiero decirle, que me parece lamentable, y una falta de responsabilidad por su parte, que se atreva alegremente a opinar sobre algo que desconoce, o al menos no conoce en su totalidad. Cuando se opina sobre algo que se desconoce, teniendo en cuenta que se están vulnerando los derechos fundamentales de un menor, me parece una infamia.

Estimado señor, puesto que usted ostenta un cargo de tantísima responsabilidad, en mi opinión, debería canalizar sus energías en controlar el uso discriminatorio que se está haciendo de los órganos por parte de esos equipos que usted dice tan altamente cualificados.

En nuestro peregrinar, hemos oído hablar de un protocolo . Lo hemos pedido y no hay rastro de él. Según los especialistas, se dice en el protocolo que en niños como Fabio no es viable el trasplante.

Quiero hacerle tres preguntas: ¿Forma parte la Organización Nacional de Trasplantes de este protocolo miserable y discriminatorio?; ¿Es esta la manera más cómoda de acortar las listas de espera?; ¿Cuánto tiempo tardará en excluir de las listas a fumadores, personas con sobrepeso, o ciudadanos poco agraciados físicamente?

Espero sinceramente que haya cumplido sus expectativas como persona, pues a mí, como ser racional, estar permitiendo y alentando este genocidio en personas con discapacidad no me dejaría dormir.

CAMBIAR LA LEY ELECTORAL

Seguimos con elchantaje de las minorías

Joaquín García Mayo

Correo electrónico

Creo que nadie debe negar a cualquier comunidad autónoma que reivindique las competencias que estén dentro de la Constitución, pero sí pedir que haya una ley que impida que las minorías chantajeen a los Gobiernos de todos los españoles sean del signo que sean cuando se encuentran en minorías y necesitan el apoyo parlamentario para unos Presupuestos del Estado, y lo más intolerables de este tema, es que el partido mayoritario de la oposición apoye dichos chantajes.

No les importa a los señores del Partido Popular unir sus votos a un partido ideológicamente que le repele con tal de hacer oposición al partido gobernante. Los culpables de esta situación insostenible de chantaje al conjunto de los ciudadanos, la tienen los propios partidos mayoritarios que no se ponen de acuerdo para hacer una ley electoral que acabe de una vez para siempre con esta situación de contrapartidas de chalaneos de competencias a cambio de los apoyos parlamentarios en el Congreso.

Una ley para que cada partido político ya sea pequeño o grande tenga la fuerza parlamentaría conseguida con los votos en el conjunto del país, y no la que tienen ahora, que con unos cuantos votos se convierten en algo imprescindible para el partido gobernante de turno, cuando necesitan cualquier apoyo parlamentario.

Una ley en que los dos partidos mayoritarios se pongan de acuerdo interponiendo los intereses del conjunto del Estado por encima de los intereses ideológicos de sus correspondientes partidos y que impida que las minorías tengan la llave de la gobernabilidad de todo el país y sometan a los gobiernos de turno al chantaje de reivindicaciones por la falta de los apoyos puntuales de los partidos mayoritarios.