Lectores

Peligro en los pasosde peatones

Diego Algaba Mansilla

Badajoz

Aunque procuro ser en más ocasiones peatón que conductor, las distancias entre ciudades y en la ciudad me obliga a utilizar el coche .

Tanto siendo peatón como conductor me preocupa la misma cuestión: los pasos de peatones. Existen circunstancias que pueden abstraer al conductor. Por ejemplo la cegadora luz que produce el sol a ciertas horas, algunos peatones no reparan en que en muchos pasos de peatones las rayas blancas pintadas en el asfalto están borradas y no se ven con claridad y aunque exista la señal vertical son pocos los conductores que reparan en ella, incluso los hay que no conocen su significado.

Existen peatones que se lanzan a la calzada siguiendo el mismo paso que llevaban cuando caminaban por la acera sin aminorar el ritmo y sin comprobar si viene algún automovilista despistado. El peatón se siente protegido con la barrera del paso de peatones como si esto fuese una armadura protectora imposible de derribar por el conductor, pero algún automovilista distraído puede atropellar con su vehículo y llevarse por delante al vulnerable peatón. Hay personas que saben perfectamente sus derechos, y el peatón tiene derecho a cruzar por los sitios destinados para tal fin, pero esto no le exime de un posible accidente. El peatón parece haber perdido el miedo a los coches olvidando las enseñanzas de padres y maestros, aquella frase repetida hasta el hartazgo antes de cruzar mirar a un lado y a otro . Porque existen los peatones que se lanzan a la calzada igual que se tiran a la piscina en verano, peatones sin temor al peligro que supone cruzar sin mirar aunque lo hagan por el lugar correcto.

MI PERRO HA MUERTO

Más que amigos

Mar Jiménez Rodríguez

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Quienes han tenido o tienen la suerte de disfrutar de un perro, entenderán lo que escribo: Para mi desgracia he perdido a mi compañero --pues eso era--, en el desapacible mes de febrero y mis días ya no son lo que eran. Astérix, que así se llamaba, llegó sin esperarlo hace ocho años y así se ha ido, sin anunciarme su marcha. No tenía raza ni pedigrí, pero tenía bondad y un corazón tan noble, que se reflejaba en sus ojos brillantes como dos canicas. Fue su mirada la que me adoptó, porque fue él el que me eligió a mí y no yo a él: Nada más verme supo que yo le daría todo el amor que hasta entonces le habían negado y así sucedió, aunque debo decir que mi chiqui compensaba con creces el cariño que yo le daba. Compartió mis horas de estudio y de trabajo, de alegrías y de penas porque siempre estaba ahí, en lo bueno y en lo malo.

¿El mejor amigo del hombre? Bastante más que eso. Astérix me obsequiaba cada día con sus dones y me daba lecciones de entrega, generosidad y nobleza.

Su corazón se paró y como no le gustaba verme triste intentó apagar mis lágrimas porque sé que desde algún sitio me observa y me protege. Al levantarme cada mañana y ver los ojos luminosos de mi retoñito, veo también los suyos que me dicen: ¡No estés triste, estoy contigo!

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La Iglesia no estáen recesión

Joaquín García Mayo

Correo electrónico

La Iglesia católica no tiene que ajustarse el cinturón por el tema de la crisis, el pasado año recaudaron 40.006 millones de las antiguas pesetas por la X en la casilla del IRPF, el nuevo impuesto del diezmo de la época del medievo. Así que cuando dicen que todo el mundo está en recesión no es verdad, la Iglesia de los grandes palacios no tiene que apretase el cinturón como el resto del mundo.

No tienen que apretárselo ni tampoco preocuparse dónde invertir el dinero recaudado por la casilla del IRPF. El alcalde Ruiz Gallardón le acaba de ceder al Arzobispado de Madrid una parcela de 25.000 metros cuadrados de una zona de gran valor histórico para que construyan varios edificios.

Quiero separar mi crítica a la Iglesia que vive en los grandes palacios, y que tiene dinero y terreno para construirse su minivaticano en Madrid, de la Iglesia que tiene toda mi consideración y que predica con el ejemplo sacrificándose por los desheredados del mundo muy en contradicción con la política de los grandes jerarcas de la Conferencia Arzobispal que se dedican a organizar manifestaciones de protesta contra el gobierno que más generoso está siendo con ellos.