TAtbrir un buen libro suele ser siempre un descubrimiento. Asomarse a sus páginas es cruzar un puente en compañía. Es compartir o rechazar ideas, sensaciones, olores, pensamientos. Pero, cuando abrimos un buen libro, siempre es dejarse fascinar por la inteligencia. En Cáceres, en el Centro de Exposiciones San Jorge e iglesia de la Preciosa Sangre, podemos ver a Extremadura en unos cientos de libros abiertos. Es un recorrido histórico fascinante por nuestra comunidad, reflejada en sus libros. Los que la han habitado, han dejado sus rastros escritos en piedra, en pergaminos, en barro, en cobre, en papel. Quizá con conciencia de tiempo. Con paciencia y deseo de vencerle, de comunicarse, con los que han de venir. Con deseo de perdurar o de perecer. Ahí están nuestros libros, para que veamos en un golpe de vista qué contienen.

Invito a visitar, sobre todo a los escolares y a los amantes del libro, este recorrido por los libros abiertos de Extremadura en sus páginas, del papel a la web . Para que los extremeños nos veamos en nuestro pasado y podamos, reflejados en ellos, atisbar nuestro futuro. Nuestro futuro de ser libros abiertos. Libros que a cada instante hay que saber escribir, hay que saber leer.

*Cantautor