Es uno de los cantautores más comprometidos, aunque su fama no haya alcanzado las cotas de otros artistas más mediáticos. Pero Luis Pastor (Berzocana, Cáceres, 1952) se ha ganado la vida abriéndole los ojos a la gente sobre aconteceres e injusticias de la vida. Pastor emigró a Madrid a principios de los 60 y se instaló en el barrio de Vallecas, aunque siempre se ha sentido extremeño y posee la Medalla de la comunidad. A los 14 años dejó el colegio y entró a trabajar de botones en una compañía de seguros de muerte. A los 16 compró su primera guitarra y tras escuchar a Paco Ibáñez y descubrir la poesía, decidió que lo suyo era el mundo de la música. Hoy presenta en Cáceres su último trabajo (tiene editados una veintena), un disco con poemas de Saramago.