En 2012 finaliza su mandato como Secretario General de la ONU el coreano Ban Ki-moon , y ya comienzan las quinielas sobre quién será su sucesor. Desde el momento de su creación, Naciones Unidas ha contado con 9 secretarios generales, de los cuales 4 han sido europeos, dos asiáticos, dos africanos y un latinoamericano. Todo parece apuntar a que el próximo proceda del continente americano, especialmente mirando al sur, aunque suenan otros muchos nombres de Europa, que no ocupa el cargo desde 1981, fecha en la que terminó su mandato el austriaco Kurt Waldheim .

En América Latina han sonado dos nombres con bastantes posibilidades. Uno es Lula da Silva , presidente de Brasil, quien termina su mandato a finales de este año. Podría ser postulado con el apoyo de muchos países, gracias a su gran aceptación, fruto del despliegue internacional que ha realizado la diplomacia brasileña. La trayectoria personal de Lula y sus logros en la configuración del nuevo Brasil como país emergente, así como su innegable liderazgo en América del Sur, son buenas cartas de presentación para aspirar al cargo.

Otro de los nombres que suenan es la recién destronada de la Presidencia de Chile, Michelle Bachelet . Los que han hecho circular su nombre están promoviendo que por primera vez una mujer se haga cargo de la Secretaría General desde 1945, ello sin desmerecer las virtudes personales de la chilena, su capacidad de diálogo e interlocución y sus grandes dotes para saber escuchar. Sin embargo, parece que Bachelet está más interesada en prepararse para volver a la presidencia de su país en 2013, ante la falta de alternativas dentro de la Concertación.

Así las cosas, Lula tiene muchas posibilidades de convertirse en Secretario General de las Naciones Unidas, colocando en el puesto a un hombre con un perfil muy diferente del actual, mucho más dinámico y que tendría capacidad para afrontar la necesaria y urgente reforma del Sistema de las Naciones Unidas. Volvería así al cargo un americano del sur, desde que asumiera el mismo en 1982 el peruano Javier Pérez de Cuéllar .

Aún queda mucho tiempo, pero hemos de observar con atención los pasos de Lula tras las elecciones brasileñas de septiembre de este año para comprobar si realmente está interesado en ocupar la Secretaría General de la ONU.