El duelo Gómez o Jiménez - Jiménez o Gómez está servido. La batalla para ser candidato a la Comunidad de Madrid se vive como una noche de sables y mortíferas dagas florentinas. Y donde Zapatero comete nuevamente el error al imponer a Trinidad Jiménez como lo fue ayer imponer a Sebastián . Porque en Zapatero equivocarse, como siempre, es su mal de ojo.

Ayer, los madrileños patearon a Zapatero en el trasero de Sebastián. Hoy el presidente del Gobierno, con su imposición, está propiciando que sean los militantes socialistas quienes repitan la jugada, esta vez con su pupila Trinidad. Aunque lo más arriesgado para Zapatero, en la batalla por Madrid, es que si Tomás Gómez consigue el no pasarán la derrota de Rodríguez Zapatero se habrá consumado.

Dicen las malas lenguas que el aval principal de Trinidad Jiménez es el de ser la niña de los ojos de Rodríguez Zapatero, qué mala es la envidia. De Tomás Gómez se cuenta que su principal activo ha sido el de decir no a Zapatero, según Rubalcaba , que es quien mejor machaca las granzas en este país llamado España.

En este duelo, ambos contendientes tratan de simular una actitud de juego limpio, algo imposible cuando en el enfrentamiento directo de los dos candidatos Trinidad Jiménez cuenta con el respaldo directo y sin ambigüedades del aparato del partido socialista, mientras que Tomás Gómez recibe patadas en la espinilla. Y a esto le llaman en el PSOE democracia interna.

La rebelión a bordo del PSM marcará el inicio del fin de la era Zapatero, siempre y cuando Tomás Gómez y sus seguidores consigan sacar adelante su proyecto. En el caso contrario, las consecuencias serán la caza de brujas, el ostracismo y el si te vi no me acuerdo, por parte de los fieles conversos, hacia quienes osaron desafiar a la poderosa dirección del partido.

La estrategia de Zapatero en Madrid es de quita y pon , primero fue Trinidad Jiménez quien ya se presentó y perdió. Tras dos meses en la oposición y desempeñar otros cargos fue puesta en Sanidad. La misma historia de Sebastián, ministro de Industria, también fue un candidato de quita y pon, porque perdidas las elecciones desapareció sin ni siquiera formar parte de la oposición.