Antiguamente las parejas se prometían amor "hasta que la muerte nos separe". Hoy no tienen tanta ambición y solamente lo prometen "hasta que la política nos separe". Desde luego las estadísticas de separaciones en nuestra clase política extremeña son significativas y, según las malas lenguas, se esperan de inmediato novedades sorprendentes. Hasta en las parejas de hecho. ¿Será el 15-M?