Hijo del escritor y filósofo Gaston Berger, Maurice Béjart (Marsella, Francia, 1-1-1927) modificó su apellido para rendir homenaje a la memoria de la actriz Armande Béjart, esposa de Moliére y protagonista de varias de sus obras. La palabra siempre le interesó como motor de diversas artes y, desde sus comienzos como brillante bailarín hasta su amplia carrera como coreógrafo, la ha unido a sus espectáculos de música y danza. Los últimos, los que ofreció en el Festival de Peralada con su Béjart Ballet de Lausanne.

Maurice Béjart quiso recordar la relación que tuvo con Salvador Dalí y su esposa Gala, lo cual le permitió pensar en la posible reposición del ballet Gal.la con motivo del centenario del nacimiento del pintor.

Ello sería notable si se cumpliera, ya que Béjart es un gran creativo. En sus inicios provocó el rechazo por parte de los sectores más clásicos de la danza, pero triunfó en su propósito de incorporar el ballet a las formas de hacer de la sociedad contemporánea sin desvirtuar la belleza de los movimientos ni la espiritualidad de las ideas.

Béjart es miembro libre de la Academia de Bellas Artes en el Instituto de Francia y posee el Premium Imperiale, considerado como el Nobel de los artistas, que el emperador japonés Aki Hito le impuso en 1993.