Nos vamos de vacaciones y a la vuelta ya no hay tregua que valga. Como diría Julio Anguita , programa, programa, programa. Listas, listas, listas. Campaña, campaña, campaña. El fin de curso se adivina en el calendario y en los nervios de última hora que alcanzan a todos.

En el PSOE, el debate público sobre el aborto ha terminado antes de comenzar. Alguien debió pensar que sacar a dos meses de unas elecciones tan reñidas un asunto tan manipulable podría haber terminado justo al revés de como lo concibieron sus promotores. Regulando un plazo para el tercer supuesto de la ley actual --el que contempla los daños físicos o psicológicos de la madre--, sin poder avanzar a continuación ni un milímetro más en dirección a la ley de plazos. O quizá solo pensaron en que el estruendo estimula la abstención, y estruendo habría desde luego.

En Izquierda Unida, la dirección federal triunfante en las primarias ajusta cuentas con el pasado reciente y libra de paso la batalla de futuro: destituye a Alcaraz, Meyer y Monereo , miembros del sector minoritario, muy crítico con Llamazares . Y convoca primarias en Valencia confiando en que la militancia decida allí, como lo hizo en el conjunto de España, respaldar las tesis del coordinador general. Queda por ver la reacción de los jefes de la todavía poderosa federación andaluza, donde algunos hablan ya de declaración de guerra.

Y en el PP, la estrella vuelve a ser Alberto Ruiz-Gallardón . En enero, Mariano Rajoy anunciará por fin si le acompaña o no al Congreso y la impaciencia se apodera del entorno de Esperanza Aguirre . La presidenta madrileña suele hablar claro y actuar con contundencia. Puede haber todavía grandes sorpresas en esta batalla por colocarse en la posición de salida para un posible relevo en la dirección del partido. De momento, el presidente de los populares sigue en medio de la escalera. Pero cuanto más tarde en terminar de subir o en acabar de bajar, más cerca estaremos de la cita electoral y más difícil será el control de daños. Porque, sea cual sea la decisión, provocará daños sin ninguna duda.